Guanajuato, Gto.- Mientras que, en el Congreso del Estado, militantes de la comunidad de la Diversidad Sexual celebraban -no sin reproche a la mayoría panista- la aprobación de reformas a la Ley del Registro Civil a favor de sus derechos, en el Foro organizado por la Secretaría de los Derechos Humanos se tomaban fotos con la gobernadora Libia Dennise García Muñoz Ledo. Era el contraste: un Partido Acción Nacional que “por congruencia” se abstenía de votar por esos derechos y una gobernadora que presume respetarlos.
Primer tiempo: el Congreso
El 17 de diciembre, el Pleno del Congreso local aprobó reformas al Código Civil estatal en materia de rectificación de actas. Ahora los oficiales del Registro Civil tendrán a su cargo autorizar los actos del estado civil y extender las actas relativas a nacimientos, matrimonios y defunciones; así como realizar las anotaciones en las actas respectivas en los casos de reconocimiento de la identidad de género.
Incluye un artículo relativo a las anotaciones de reconocimiento de la identidad de género. A partir de la anotación de reconocimiento de la identidad de género en el acta de nacimiento original y en las actas del estado civil, el oficial del Registro Civil correspondiente deberá expedir una nueva acta con los datos que deriven del reconocimiento.
La anotación correspondiente al reconocimiento de la identidad de género quedará reservada y no se publicará ni expedirá constancia alguna que haga mención al reconocimiento, salvo a solicitud de la persona interesada, de la autoridad ministerial o de la autoridad judicial. La persona interesada podrá solicitar la rectificación de actas tantas veces lo considere necesario.
Establece que la rectificación administrativa se tramitará a petición del interesado ante la Dirección General del Registro Civil, siendo procedente en las actas de nacimiento y del estado civil para el reconocimiento de la identidad de género.
Finalmente, en los transitorios se precisa que el Ejecutivo Estatal tendrá un plazo no mayor a treinta días contados a partir de la entrada en vigor del Decreto para realizar las adecuaciones necesarias en el Reglamento del Registro Civil del Estado de Guanajuato.
A favor del dictamen hablaron la morenista María Eugenia García Oliveros, la priista Ruth Noemí Tiscareño Agoitia y la emecista Sandra Alicia Pedroza Orozco; así como el ecologista Sergio Alejandro Contreras Guerrero.
Aprobada en lo general, se hicieron cambios en la redacción para incorporar un apartado para eliminar cualquier tipo de discriminación a integrantes de la población de la diversidad sexual y de género cuando soliciten la rectificación de acta de nacimiento y estado civil.
También, a propuesta de la morenista María Eugenia García Oliveros, se hicieron cambios para que se agregue que en caso de rectificación de actas de nacimiento por identidad de género bastará la
voluntad de la persona para que lleve a cabo la rectificación de sus datos, en la que expresa el nombre elegido y la identidad de género auto percibida.
El coordinador de Movimiento Ciudadano, Rodrigo González Zaragoza, presentó otra reserva para que el Registro Civil notifique a autoridades estatales y federales de la rectificación en las actas de nacimiento. La oficina estatal tendrá que dar aviso no sólo a las dependencias estatales ante las que se realizan trámites, sino también a instancias federales, hecho que el coordinador panista consideró posteriormente como un acto que invade otras competencias y que puede afectar a las reformas en Guanajuato.
El silencio panista no fue circunstancial: salvo Aldo Márquez, el resto se abstuvo, incluida la panista María del Pilar Gómez Enríquez, formalmente perredista,
Y es que las reformas cumplen la sentencia de tribunal federal que obliga a la entidad a garantizar derechos humanos plenos. La resistencia panista al reconocimiento al derecho a la identidad de las personas trans y no binarias fue justificada por su coordinador Jorge Espadas:
Aldo Márquez Becerra, quien entró a la lista de su partido registrado como representante de los grupos de la Diversidad Sexual -para cumplir el requisito que la ley exige- fue el único panista que acompañó el dictamen de la comisión de Justicia, que surge del amparo promovido por la organización Amicus en el avance por el reconocimiento de los derechos de la comunidad LGBT+.
“Me abstengo de votar por posición política”, fue la frase repetida por 15 personas legisladoras. Esta vez el panismo se quedó solo: las dos diputadas y el diputado priista votaron por las reformas. Sólo la supuesta perredista se sumó al voto del que es su partido real.
Los gritos de “¡No sean incongruentes!”, lanzados desde el área del público por el activista Juan Pablo Delgado fueron respondidos con silencio.
También las personas integrantes de las comunidades de la Diversidad Sexual que se han sumado a las campañas electorales panistas hicieron el reproche: Rubí Araujo, que apoyó a la panista Samantha Smith, le reclamó al diputado panista Juan Carlos Romero Hicks que ella votó por él.
Rubí Araujo es la primera mujer trans en ocupar un cargo público en Guanajuato. En 2016 fue regidora en el Ayuntamiento de Guanajuato postulada por el Partido de la Revolución Democrática; luego fue candidata por Movimiento Ciudadano y ahora apoya al panismo. El “¡Juan Carlos, acuérdate cuando buscabas el voto!” no tuvo ni siquiera una mirada como respuesta.
La otra cara azul
La postura de la bancada panista es contraria a las acciones del gobierno de Libia Dennise García Muñoz Ledo, que en la estructura gubernamental creó la Subsecretaría de la Diversidad Sexual, dentro de la Secretaría de Derechos Humanos.
“Creo que un Guanajuato en donde se escuchan todas las voces, es un Guanajuato inclusivo, un Guanajuato que avanza en el reconocimiento de todos los derechos”, dijo la gobernadora al Inaugurar el 1er Foro Estatal de Derechos Humanos “En Alianza por un Nuevo Comienzo”, un día después de la aprobación de las reformas.
Con este evento, añadió la mandataria, se busca contribuir al fortalecimiento del respeto, cultura y promoción de los derechos humanos; sensibilizar al personal del funcionariado público respecto al trato y necesidades de estos grupos poblacionales, en la búsqueda de acciones innovadoras para su atención; conocer y difundir los mecanismos y procedimientos de atención, apoyo y servicio a personas migrantes, indígenas, en situación de discapacidad, así como de las diversidades sexuales y de género.
Y eso se reflejó en las Mesas de Diálogo realizadas como parte del Foro: “Diálogos por la Diversidad: Visibilicemos a las Disidencias Sexo Genéricas”; “Reto en Construcción: Inclusión de las Personas con Discapacidad en el Empleo Público”; “Retos y Desafíos de la Migración Internacional”; “Diálogos sobre Comunidades Indígenas y Personas Afromexicanas”.
Cuando la gobernadora dejó el pódium, el primer grupo que la buscó y la apapachó fue el de la Diversidad Sexual, donde sobresalían Rubí Araujo, la primera regidora trans de Guanajuato y el país, e Ivanna Tovar, la primera egresada trans reconocida como tal por la Universidad de Guanajuato.
Los gritos contra los panistas en el congreso y los besos y abrazos en el Centro de Convenciones de Guanajuato muestran a esa doble cara panista.