Manuel Doblado, Guanajuato. – Los campesinos en Manuel Doblado dijeron que el mercado del agave ha tenido una caída en los precios en los últimos años; hace apenas un año algunos productores alcanzaron a rentar sus tierras de entre 20 mil a 35 mil pesos por hectárea con contratos a seis años. Sin embargo, hoy en día, se enfrentan a precios de 5 pesos por kilo debido a la saturación del mercado.
El caso de un productor que logró vender 36 mil plantas a 17 pesos cada una, por más de 600 mil pesos; hace apenas dos años fue el ejemplo que dieron para entender el panorama actual que ha descendido “drásticamente” en los últimos dos años se ha pasado de vender de 20 pesos a los 5 pesos por kilo, inclusive mencionaron que “ni regaladas quieren las plantas actualmente”.
A pesar de haber sido una oportunidad para hacer más rentables las parcelas, el crecimiento descontrolado del cultivo de agave plantea riesgos para la fertilidad del suelo. En Guanajuato, las hectáreas destinadas a este cultivo han aumentado hasta 48 veces en los últimos 22 años, alimentadas por grandes empresas que compran cosechas por adelantado, generando una explotación masiva de la tierra.
Y es que es importante mencionar el caso de Jalisco, una vez líder en el cultivo de agave que ahora enfrenta problemas “irreparables” en la calidad del suelo y algunas regiones erosionadas, incapaces de sostener la agricultura de su región.
Antes de la llegada del agave, los dobladenses cultivaban trigo y maíz, cultivos que apenas permitían subsistir a los agricultores. La rentabilidad del agave, con ganancias entre el 350 y el 600% en comparación con otros cultivos, atrajo a los productores, pero ahora se enfrentan a un mercado saturado y precios en declive.
Muchos productores decidieron apostar por el agave debido a que cultivar trigo y maíz en los últimos años les había causado mayormente perdidas debido a la escasez del agua que estamos viviendo en el estado de Guanajuato, otros decidieron aprovechar la oportunidad y rentar sus tierras obteniendo un ingreso fijo mensual desde la comodidad de su hogar, ya que los contratos realizados con las empresas son por varios años.
Los municipios que más han apostado al agave son Pénjamo y Romita, con 5 mil 254 y 5 mil 144 hectáreas, respectivamente, pero asumiendo un riesgo alto de degradación de su suelo.
Los estados de Guanajuato y Jalisco, así como el Consejo Regulador del Tequila y la Cámara de la Industria Tequilera, firmaron un convenio para que el tequila sea la primera bebida sustentable a nivel nacional en el año 2021, parte del tratado condicionaba a las empresas productoras a sólo comprar el agave a quienes cuenten con un certificado de “agave responsable ambiental”.