Las pastillas para el dolor severo conocidas como ketorolaco pueden ser muy efectivas para aliviar las molestias, pero también pueden tener efectos secundarios en la salud, por lo que especialistas recomiendan no consumirlas en exceso y sin la prescripción de un médico.
Cuando tienes un dolor fuerte, especialmente un dolor de cabeza, lo primero que seguramente consumes es ketorolaco pero te damos razones para dejar de hacerlo de forma frecuente.
El ketorolaco se usa principalmente para el alivio a corto plazo de dolor intenso y no debe usarse por más de 5 días.
Como es un medicamento más fuerte que una aspirina, puede haber riesgo de problemas cardíacos o accidentes cerebrovasculares en quienes lo toman frecuentemente.
Ketorolaco y sus efectos secundarios
Los cambios en el cuerpo por tomar ketorolaco pueden ser físicos o emocionales y alguno de sus efectos son los siguientes:
• Ampollas en la boca
• Aumento de peso inexplicable
• Dificultad para respirar
• Abdomen, pies y tobillos hinchados
• Coloración amarillenta en piel y ojos
• Cansancio excesivo
• Sangrado o moretones
• Malestar estomacal
• Pérdida de apetito
• Dolor en la parte superior derecha del abdomen
• Síntomas similares a la gripe
• Ritmo cardiaco acelerado
• Orina oscura, descolorida o con sangre
Los efectos secundarios del ketorolaco más delicados son la hinchazón en el rostro, manos, parte inferior de las piernas, tobillos y pies, así como aumento inusual de peso, por lo que debes consultar a tu médico y suspender de inmediato la toma del medicamento.
Es importante que ante un dolor fuerte evites automedicarte y si presentas los síntomas que mencionamos, acude de inmediato con tu médico.
