
México.- El pasado 25 de diciembre de 2025 era, según las predicciones de Ebo Noah, profeta de Ghana, el día en que el mundo comenzaría a sumergirse bajo un diluvio de tres años. Sin embargo, ante el llamado ‘evento fallido’, el hombre afirmó que “Dios nos dio más tiempo”.
Ebo Noah, quien ha dedicado los últimos meses a construir ocho grandes arcas de madera con capacidad para 40,000 personas, dijo que el mensaje de castigo se transformó en uno de esperanza. De acuerdo con el clérigo, la llegada masiva de personas de todo el mundo a Ghana buscando refugio conmovió el corazón de Dios.
“En la visión, al ver la cantidad de personas que vienen de todo el país y de todo el mundo hacia el arca, la expansión de la estructura no podía contenerlos”, declaró Noah.
Para el profeta, fue esta muestra de fe y la necesidad de dar cabida a más almas lo que motivó que el evento catastrófico no ocurriera en la fecha prevista, interpretándose como un “tiempo extra” para que el mundo se prepare espiritual y físicamente.
La noticia de la construcción de estas naves provocó un flujo migratorio de miles de personas hacia la región donde Noah trabaja. Personas de diversas nacionalidades llegaron con la esperanza de ocupar un lugar en las embarcaciones de madera que, él afirma que ya han comenzado a atraer animales de diversas especies por instinto.
Tras su profecía ‘errónea’, la gente que vendió todo para conseguir un lugar en las arcas, mostró una profunda indignación que ocasionó que una multitud quemara un barco en las costas del país africano, confundiéndolo con una nave del ‘mensajero de Dios’.
