Irapuato, Guanajuato.- Anna Paula Barrón de 18 años de edad, violinista de la Sinfónica Malher, tiene ya varios años siendo miembro de esta orquesta.
Su gusto por la música se ha ido extendido a lo largo del tiempo, a tal grado, que ahora está incursionando en aprender a tocar instrumentos de boquilla circular como lo son la trompeta y el corno francés.
Anna Paula contó que se enamoró de la música desde muy pequeña, “amor a primera vista, jamás va a olvidar el primer concierto que vio por televisión y la magia de observar como el director conducía a la orquesta”.
La violinista señaló que hay dos cosas muy difíciles cuando se está aprendiendo un instrumento; la perseverancia y la dedicación; ya que son la piedra fundamental para que un músico pueda crecer en la ejecución del instrumento.
Anna Paula recordó su primer concierto como integrante de la orquesta, fue en el octavo aniversario de la agrupación en la catedral de la ciudad de Irapuato, “desde entonces no me ha bajado del escenario, me atrapó”.
Dentro de su corta y exitosa carrera como músico, ha participado en grandes foros como lo fue el Festival Internacional Cervantino, dónde tuvo la oportunidad de cantar en el coro de niños la difícil y afamada “Sinfonía de los Mil” del compositor Gustavo Malher y como violinista la Carmina Burana” de Carl Orff.
La violinista irapuatense contó que la vida le arrancó de manera brutal a uno de los pilares más grandes de su vida, su tío Gabriel, víctima colateral de un ataqué arando, sin embargo la música fue su refugio para poder reponerse de tan lamentable perdida, pues la música ya forma parte de ella y le ayudó a canalizar los sentimientos y emociones que experimentó en tan lamentable suceso.
