Las enfermedades o trastornos psiquiátricos, también conocidos como trastornos mentales son patologías como cualquier otra enfermedad, en donde hay alteraciones químicas – cerebrales que producen diversos síntomas, que en caso de no atenderse puede convertirse en crónicas o complicarse.
“Las enfermedades psiquiátricas más comunes tienen que ver con trastornos de ansiedad o depresivos, en México los trastornos más prevalentes son los de ansiedad, dentro de los cuales entran los ataques de pánico, fobias, estrés postraumático, trastorno obsesivo compulsivo, etc.”, dijo el doctor José Antonio Jasso Molina, psiquiatra de la Unidad Médica de Alta Especialidad No. 1, del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS).
Agregó que en segundo lugar se encuentran los trastornos depresivos: depresión, distimia o tipo de depresión leve, pero crónica; y también el trastorno bipolar.
Muchas enfermedades pueden llevar al suicidio, la más prevalente es la depresión, aproximadamente dos terceras partes de las personas que se suicidan estaban cursando un cuadro depresivo. También se llegan a suicidar pacientes con esquizofrenia, adicciones, anorexia, entre otras enfermedades.
La causa de la depresión es multifactorial, no sólo es genética y ambiental, sino biopsicosocial, es biológica por la presencia de alteraciones químicas cerebrales relacionada en ocasiones con predisposición genética, psicológicas por estrés debido alguna situación de adaptación, pérdida o duelo, y sociales de acuerdo al ambiente en el que la persona se desenvuelve.
Los síntomas cardinales de la depresión son: tener un ánimo bajo o triste durante dos o más semanas, a la par un síntoma conocido como anhedonia o pérdida de gusto, placer o motivación por cosas que se disfrutaban realizar, puede existir pérdida o aumento del apetito, insomnio, exceso de sueño durante el día, falta de concentración, sentimiento de incapacidad y/o desesperanza.
La depresión debe ser tratada por un especialista en psiquiatría, porque en caso contrario puede complicarse o convertirse en crónica. La edad principal en que se presentaba hace tiempo era entre los 15 y 29 años, aunque en la actualidad existe incluso la depresión infantil, pero en realidad se puede padecer a cualquier edad.
Resaltó Jasso Molina la importancia de que los pacientes no abandonen los tratamientos para hacer que los síntomas se quiten por completo, ya que si no se eliminan al 100 por ciento puede recaer la persona. Son tratamientos largos, hasta por dos años.
Las recomendaciones generales son atender la depresión a tiempo, no automedicarse ni utilizar remedios caseros, por otra parte recomendó el especialista del IMSS los buenos hábitos en la alimentación, dormir de 6 a 8 horas cada noche, al acostarse ya no tener estímulos como televisión, celular, tabletas, etc.; realizar 30 minutos de ejercicio 5 días a la semana por lo menos, mantener buena capacidad de lectura, académica y laboral para mantener ocupada la mente.
Finalizó indicando que entre el 70 y 80% de la consulta en el servicio de psiquiatría de la UMAE No. 1 del IMSS son por depresión y ansiedad. En Promedio en el mundo se suicida un millón de personas al año.