Irapuato, Guanajuato.- Entre 1940 y 1941 por órdenes del entonces presidente municipal de Irapuato, José Arroyo Chagollán, lo que era conocido como “Teatro de la comedia” fue adaptado para convertirse en cárcel para mujeres, el extinto teatro se situaba entre las calles de La Enseña Fernando Dávila y lo que era la calle Díaz Mirón hoy avenida Revolución.
En ese mismo inmueble donde se ubicaba la cárcel para mujeres también se encontraban las oficinas de tránsito y la comandancia, cabe destacar que tiempo después en 1943 Martín Zuloaga Vargas ordenó derrumbarla para colocar que en esa zona el Mercado Central.
Fue entonces hasta 1984 durante la administración del presidente municipal Sebastián Martínez Castro que se construyó la Plaza de los Fundadores donde está plasmada la historia del hombre irapuatense construida durante 7 siglos, mediante artes contemporáneas.