Brasil será el primer país sudamericano en estrenar el uso de las tarjetas verdes, que servirán para premiar el juego limpio dentro del campo de juego.
La Confederación Brasileña de Fútbol (CBF) anunció que las cartulinas serán utilizadas en el marco de la Copa Verde, que se disputará en la ciudad de Belém, en el estado de Pará, e incluye a los equipos oriundos de esa zona norteña.
Las tarjetas podrán ser mostradas incluso una vez finalizado el partido, pero al igual que la amarilla y la roja, solamente será utilizada para los jugadores que estén en el campo, los sustitutos y los sustituidos.
La función es contraria a la de las otras tarjetas, ya que en lugar de castigar a los protagonistas, el objetivo es premiarlos, de manera simbólica, por acciones que demuestren “respeto, cultura deportiva y responsabilidad social”.
Si bien Brasil es pionero en el continente, la FIFA dio permiso a todas las federaciones para utilizar este mecanismo en las divisiones inferiores hasta 2017, como período de prueba, y la Serie B de Italia fue la pionera el último fin de semana.