Salamanca, Guanajuato.- Rosa María “N” de 24 años, quien actualmente radica en la ciudad de Salamanca, dijo haber huido hace 4 meses de su propia casa y de su pareja que la golpeaba, para empezar una nueva vida junto con sus dos hijos pequeños, motivo por el que pide ayuda económica en la calle para “sobrevivir” mientras encuentra un trabajo.
Rosa María dijo tener apoyo de un familiar quien le da alojamiento mientras encuentra un lugar para vivir, además de que por la situación del Covid-19, comentó no poder emplearse fácilmente en algún trabajo y con quién dejar a sus hijos.
“El padre de mis hijos no es mi esposo porque nunca nos casamos, pero sí vivíamos juntos, solo que yo decidí salirme porque él siempre me pegaba, desde que me salí de la casa no he sabido nada de él, ni tampoco me ha buscado”.
La joven mujer, comentó no conocer en Salamanca alguna institución que le brindara apoyo a mujeres violentadas, diciendo con voz entre cortada, que pedía dinero en las calles para poder comer y comprarle a sus niños de 4 y 1 año de edad, leche y pañales para el más pequeño.
De acuerdo con el Instituto Municipal de Salamanca para las Mujeres, la violencia contra el sexo femenino, especialmente mujeres casadas, aumentó un 30% este último año, ya que según sus estadísticas, acuden mayor número de mujeres que sufren de maltrato físico, sexual y psicológico por parte de sus parejas, que luego del confinamiento, detonó en agresividad y maltrato hacia sus parejas.