México
Los besos de amor verdadero, tan románticos y encantadores, también tienen su lado oscuro: un virus de la familia de los herpes. La mononucleosis infecciosa popularmente conocida como la enfermedad del beso, tiene como principal síntoma el cansancio crónico. Este virus se transmite a través de las secreciones de nariz, boca y garganta.
En inglés, esta enfermedad es conocida como “kissing tonsils” que significa anginas que se besan, de aquí se deriva el nombre enfermedad del beso. La forma más común de transmisión de este virus, llamado Epstein – Bar, es por medio de los besos apasionados.
Debido a los síntomas de la enfermedad del beso, es muy fácil que se confunda con los síntomas de la gripa o rubeola, cuando los pacientes presentan erupciones en la piel.
En una mínima de cantidad de casos, quien contrae la enfermedad del beso puede presentar inflamación del hígado o del bazo, esta situación ya se considera de alto riesgo puesto que el crecimiento acelerado del bazo puede provocar que estalle y, con esto, contaminar el organismo. Alberto Villaseñor, investigador adscrito al Centro de Investigación Biomédica de Occidente (CIBO) del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) en Jalisco, señaló que: “Al ser un importante depurador de bacterias encapsuladas, quien se queda sin bazo es presa fácil de infecciones generalizadas o sepsis, conocidas por su alta letalidad”, según información del sitio vanguardia.com.mx.
El experto, Alberto Villaseñor, también señaló que el periodo de incubación del virus puede ser de uno a dos meses, desde que aquel beso apasionado hizo de las suyas al alojar en el cuerpo el virus Epstein- Barr.
Para prevenir la enfermedad del beso lo más eficiente es dejar de besar, sin embargo, ¿quién podrá hacerlo? Entre otras recomendaciones para disminuir el riesgo de contraer el virus se deberá evitar el contacto con personas que presenten estornudos, tos o alguna afección de las vías respiratorias. Asimismo se recomienda no automedicarse sino acudir al médico para una valoración exhaustiva y recibir el tratamiento adecuado.