MEXICO DF,- Aeroméxico, la mayor aerolínea del país, y su sindicato de sobrecargos sostenían el viernes negociaciones contrarreloj a fin de evitar una huelga programada para el primer minuto del sábado que dejaría en tierra a unos 300 vuelos diarios.
Una paralización de las actividades de Aeroméxico afectaría a unos 25,000 pasajeros diarios -unos 14,000 en rutas domésticas y 11,000 en vuelos internacionales- que la aerolínea transporta en una flota de 56 aviones.
“Sigue la mesa de negociación en la Secretaría del Trabajo”, dijo la Asociación Sindical de Sobrecargos de Aviación (ASSA) que representa a más de 1,300 sobrecargos de Aeroméxico que demandan un incremento de alrededor del 5 por ciento a salarios y beneficios.
Aeroméxico ha ofrecido mantener las condiciones contractuales de los sobrecargos actuales y un alza salarial del 4.2 al 4.8 por ciento dependiendo de la inflación durante tres años.
La compañía también propone nuevas condiciones contractuales para futuros sobrecargos, lo que el sindicato ha rechazado tajantemente.
Aeroméxico ha dicho que si el sindicato de sobrecargos acepta la propuesta, retirará un recurso legal llamado demanda de Conflicto Colectivo de Naturaleza Económica que interpuso el 12 de abril en busca de modificar las condiciones del contrato colectivo de trabajo.
Una fuente cercana a las negociaciones dijo a Reuters que hasta este momento Aeroméxico mantiene su oferta.
Aeroméxico -que transportó 14.8 millones de pasajeros en el 2012- es propiedad de un grupo de empresarios locales y de la estadounidense Delta Airlines y el banco mexicano Banamex, unidad de Citigroup que tienen participaciones accionarias.
Las acciones de Aeroméxico ganaban un 0.62 por ciento en la bolsa mexicana, a 16.19 pesos.
VERONICA GOMEZ SPARROWE / REUTERS
