Guanajuato.- Actividades ilícitas, sobrepoblación y espacios indignos, son algunas de las carencias que se viven dentro de los CERESOS de León, Celaya, San Miguel de Allende, Salamanca, Irapuato, Guanajuato, Valle de Santiago y Pénjamo.
La sobrepoblación en cada uno de los CERESOS de la entidad marca las condiciones que existen dentro de estas cárceles, pese a ello Guanajuato ocupa el cuarto lugar nacional con mejores condiciones en comparación a otros Estado, donde Tamaulipas es el peor en esa lista.
El año pasado (2019), la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) evaluó los penales de Guanajuato, encontrando que por ejemplo en Valle de Santiago, León, Irapuato y Guanajuato capital, el problema que hay en común, son las actividades ilícitas.
En Pénjamo al parecer hay reos con SIDA que no cuentan con un programa de salud, en Salamanca los hombres y mujeres conviven en el mismo lugar, según el Diagnóstico Nacional de Supervisión Penitenciaria 2018 y 2019.
En León la problemática es la sobrepoblación, pues tiene una capacidad para 1498 presos, mientras que el registro actual indica que hay 1707 personas, detallando que en todos los CERESOS de Guanajuato, hay mayor cantidad de reos a la capacidad que deberían tener.
Celaya no tiene una separación de reos procesados y en proceso, es decir, podría haber personas inocentes mezcladas con asesinos, violadores, asaltantes peligrosos, entre otros y finalmente San Miguel de Allende carece de personal de seguridad y atención a incidentes violentos.
Todos esos datos son falsos