Cuerámaro, Guanajuato.- José Ornelas, de 45 años de edad es un cueramarense que ha pasado por muchas complicaciones a lo largo de su vida, pero ninguna le ha quitado sus ganas de vivir.
Desde sus primeros 8 días de nacido José Ornelas fue diagnosticado con tétanos y esta enfermedad le complicó su desarrollo.
“Yo con 8 días de nacido me contaban mis papás de mí que me dio tétanos y pues mi pie no crecía bien y caminaba mal, con la rodilla hacia dentro y de lado”, externó.
El cueramarense recuerda que en 1985 tenía programada una intervención para mejorar su vida la cual no salió como se esperaba.
“Tuve una cirugía en México, me quitaron mi rodilla y pues la verdad, los doctores no supieron qué hacer conmigo, lo único que supe fue que jamás iba a poder flexionar mi pierna”, declaró.
A sus escasos 11 años de edad José tenía que sufrir inmensos dolores debido a su padecimiento.
Al pasar de los años José se casó de su amor nació su hija, además el busco la manera de salir adelante en distintos trabajos para llevar el sustento a casa.
“Yo no reniego de la vida que me toco, si dios me mando así fue por algo y gracias a él tengo a mi familia e hija, si no puedo trabajar por mi discapacidad”, dijo.
El cueramarense explicó que ahora el gobierno municipal lo ha apoyado considerablemente ya que debido a su condición no puede trabajar en cualquier sitio y agradece el apoyo constante.