Un hombre de 31 años se quedó con un daño permanente en la retina tras consumir cantidades excesivas de un potenciador sexual. El principal problema es que esto ocurrió hace un año, y el paciente todavía reporta el mismo malestar.
Aunque la alteración temporal de la vista es un efecto secundario asociado a Viagra y otros medicamentos con sildenafilo que tratan la disfunción eréctil, los doctores que han estudiado este caso nunca habían visto algo similar.
Hace 12 meses, el paciente, no identificado para la divulgación de este estudio, tomó una dosis superior a los 50 miligramos recomendados, y lo que es peor, es que fue suministrado en una presentación líquida, directo del frasco, y no recuerda cuánto fue lo que tomó.
Desde entonces, el paciente percibe todo su entorno en tonos de rojo. De acuerdo a los doctores encargados del estudio, el hombre compró sildenafilo líquido por internet, una droga que no puede ser recetada por ningún médico al no estar aprobada en este estado.
Una vez realizados los análisis, se llegó a la conclusión de que el daño a los ojos del paciente fue a nivel celular, todo por consumir un medicamento sin consultar a un doctor y tomarlo en exceso. Ningún tratamiento ha logrado aliviar los síntomas.
Explica el doctor Richard Rosen, director de servicios de la retina en el New York Eye and Ear Infirmary of Mount Sinai (NYEE):
“Si bien sabemos que la alteración de la visión es un efecto secundario conocido de este medicamento, nunca hemos podido visualizar el efecto estructural del fármaco en la retina hasta ahora”, indica el doctor.
En efecto, aunque la condición del paciente ha probado ser incurable, su caso ha proporcionado evidencia sobre los daños estructurales a un paciente humano. “Este estudio muestra cuán peligrosa puede ser una gran dosis de un medicamento de uso común.”