Irapuato, Guanajuato.- Ma. Antonia García de 61 años de edad, es una madre ejemplar la cual ha sacado adelante a sus hijos, 4 varones, después de perder a su esposo, Doña Mari, salió adelante en su puesto de tamales que se encuentra enfrente de la central de autobuses de Irapuato y tiene 23 años de tradición.
“Ser madre, es una aventura muy bonita, porque tiene de todo, tiene alegrías y tristezas, pero creo que siempre han sido más las alegrías”, dijo.
Para Doña Mari, el ser madre es una de las mejores experiencias que le regalo la vida, pues tiene 4 varones los cuales ama con todo su corazón y han sido la luz de sus ojos, José, Tomas, Daniel y Santiago.
Ahora la irapuatense, disfruta a sus nietos y siente un amor profundo por ellos pues en ellos ve la sangre de sus hijos.
“Cuando mi esposo falleció por un derrame cerebral, nos quedamos al frente y aunque fue difícil, junto con mis hijos sacamos adelante el negocio” dijo.
Doña Mari es una distinguida comerciante irapuatense que se ha dedicado a la venta de tamales por más de 23 años y es una mujer destacada, madre y comerciante.
“Todo lo que he hecho es para ellos y por ellos, mis hijos, mis 4 tesoros más preciados”, finalizó.