Por María Spino.
Guanajuato, Gto.- Por casi dos décadas la venta de flores ha sido el sustento de don José Ortega, capitalino que desde hace ya 17 años se ha dedicado a comerciar con una amplia variedad de coloridos ejemplares que alegran los hogares y corazones de los ciudadanos y turistas que acuden al jardín de Embajadoras.
Don José compartió, con Notus, que al no poder encontrar empleo comenzó a trabajar en el negocio de su suegro que es la venta de flores, ahí desarrolló amor por esta actividad y desde hace unos 20 años esa es su fuente de ingresos; le encontró tanto gusto a la actividad que, incluso, ahorró lo suficiente y levantó su propio negocio, ubicado en el jardín principal de Embajadoras, “Florería Ortega” con la que es su propio jefe y lleva ya 14 años trabajando.
Reconoce que no todo el año hay alta venta, pero resaltó que si es un producto que todos los días busca la gente y le deja por lo menos para comer; “poco pero se vende”.
Para don José la venta de flores es la actividad que le ha permitido por casi 2 décadas llevar sustento a su familia y más en la actualidad en una época en la que destacó que la vida se ha encarecido.
“Sale para un nivel más o menos, no sale para darse un lujos ni dada, pero si como dice la palabra irla pasando y volver a surtir otra ve (…) el costo de la flor si se ha encarecido un poco ya que los proveedores se las dan más cara”, explicó don José.
En su negocio se puede encontrar alhelíes, girasol, rosas, clavel, nube, tulipán, alcatraz, lisianthus, gladiolos, hortensias, entre otras que son muy demandadas por los clientes en ciertas temporadas como garra de León y cempasúchil muy solicitadas para el Día de Muertos.
Siendo el “Día de las Flores” una de las festividades más populares en Guanajuato capital cualquiera pensaría que es, también, el día de mayor venta; al igual que también lo sería el “Día de Muertos”, sin embargo don José señaló que por mucho el día de venta más alta y cuando mejor le va es el 10 de mayo.
En el negocio de la familia Ortega, emplazado en una de las zonas más emblemáticas de la capital, se puede obtener desde una flor por diez pesos, que es de clavel y es la más barata, hasta un ramo de tres flores de lisianthus por cien pesos, siendo este el ejemplar más caro por su belleza y rareza.
Más allá de que el puesto de venta de flores de la Familia Ortega es su fuente de ingresos, es también un negocio que día con día con cada amanecer llena de bellos y brillantes colores un jardín lleno de tradición en donde el comercio de todo tipo d productos es la principal actividad .