En el marco del programa “Docentes que Dejan Huella”, promovido por el Sector 17 de Preescolar de la Delegación Regional IV de Educación, se realizó un homenaje póstumo al maestro Enrique Ortiz Rivas.
Juan Luis Saldaña López, delegado de la Región IV de la Secretaría de Educación de Guanajuato (SEG), destacó el trabajo del Sector 17 de Preescolar por esta iniciativa de reconocer de manera póstuma a quienes han dejado huella por su entrega a la educación, como es el caso del profesor Enrique Ortiz.
“Las almas grandes no desaparecen, dejan huellas eternas, cuyas raíces se fortalecen y se multiplican, tal y como lo hizo nuestro estimado maestro Enrique, por ello vaya nuestro agradecimiento perenne hasta cielo”, asentó, Juan Luis Saldaña delegado de la SEG.
Laura Lozoya Ponce, jefa del Sector 17 de Preescolar, reafirmó, que la adhesión de este programa al Pacto Social por la Educación, no tiene fronteras, ni espacios, ni tiempos, es un reconocimiento que sale del corazón para quienes forjaron el sistema educativo estatal de Guanajuato y para quienes, en estos momentos lo hacen desde sus escuelas.
Como un homenaje póstumo, a quien durante muchos años coordinara las directrices y el rumbo de la tarea del proceso de enseñanza-aprendizaje en Salamanca y su región, José Luis Gómez Arroyo, jefe del Departamento de Desarrollo al Docente de la Región IV de Educación, dedicó, unas palabras al maestro Enrique Ortiz Rivas.
“El maestro Enrique, siempre fue un hombre con muchas aspiraciones desde que era niño, trabajo en el campo y daba clases, hasta el fin sus días combinó estas actividades, o sea que sembró en la tierra, sembró en las aulas y sembró en todas las personas que lo conocimos”, resaltó Gómez Arroyo.
Originario de la comunidad de Rancho Nuevo del Llanito, de Irapuato, estudió la licenciatura en Matemáticas en la Escuela Normal Superior en Guanajuato, así como la licenciatura en Pedagogía, también, en la Escuela Normal Superior de Guanajuato.
Fue maestro de educación básica en varias escuelas estatales en los municipios de: Irapuato, Salamanca y Juventino Rosas, también fue catedrático en varios colegios particulares de Irapuato.
Desempeñó varios cargos sindicales en Salamanca, Irapuato y Guanajuato; fungió como diputado de la LVIII legislatura en el Congreso del Estado y finalmente fue coordinador de Educación Básica en la Delegación Regional Salamanca de 2007 al 2017, en donde forjó todo un estilo y cultura de trabajo.
Uno de sus hijos, Enrique Ortiz Martínez, a nombre de la familia, agradeció, el reconocimiento a su padre, quien fue un hombre intachable, siempre preocupado porque las condiciones de estudio de niñas y niños fueran las mejores, “ese fue el legado que nos dejó mi padre y que hoy desde una telesecundaria replicó, sus enseñanzas las llevo en mi corazón y sus palabras en mi mente”, apuntó emocionado al recibir el reconocimiento, dentro del programa “Docentes que Dejan Huella”.