Alrededor de las 19:00 horas del domingo 21 de mayo, policías federales que efectuaban el Operativo Carrusel a la altura del kilómetro 47 de la carretera México-Puebla, con destino a la Ciudad de México, se percataron del paso de un tractocamión acoplado a un remolque, que incrementaba su velocidad y desprendía humo de las llantas traseras.
Dos unidades oficiales lo alcanzaron y a través de señas el operador confirmó que no le respondía el sistema de frenado. Se activó el protocolo para que los servicios de emergencia se alistaran kilómetros adelante y en la medida de lo posible se abriera paso a la unidad de carga hasta la rampa de frenado, ubicada a 10 kilómetros.
Con el apoyo del equipo luminoso y las sirenas, el operador del tráiler evitó una colisión con un camión de redilas cargado con tanques de gas, con otro tráiler con doble remolque, y un autobús de turismo que trasladaba un grupo de menores de edad que venían de una excursión.
En el kilómetro 37, cuando el tráiler alcanzaba una velocidad aproximada de 160 kilómetros por hora, los policías federales indicaron al operador que saliera del camino hacia la rampa para frenado de emergencia. El tráiler se impactó contra el montículo de tierra, volcó y parte de la carga fue expulsada al arroyo vehicular.
Por el techo de la cabina, que quedó inservible, logró salir el operador de 37 años de edad, y los elementos apoyados con extinguidores sofocaron el conato de incendio en las llantas traseras que comenzaban a estallar.
El conductor, quien fue revisado por una unidad médica para descartar lesiones, agradeció el apoyo de los policías federales, que permitió reportar sólo daños materiales, sin lesionados ni pérdida de vidas.