Irapuato, Guanajuato. – Hoy se conmemora el nacimiento de un hombre cuyo nombre resuena en la “historia” de México y América Latina como un “defensor” de los derechos de los pueblos indígenas y un constructor de paz. El obispo Samuel Ruiz García, cariñosamente conocido como “Tatic” en los pueblos indígenas, nació el 3 de noviembre de 1924 en la trastienda marcada hoy con el número 340 de la calle Guanajuato de Irapuato, marcando el inicio de una vida dedicada a la “justicia y la igualdad”.
Hijo de inmigrantes, Ruiz García pasó su infancia en Irapuato y a los 13 años ingresó al Seminario Diocesano de León, donde su vocación religiosa comenzó a florecer; en 1947, fue ordenado sacerdote después de estudiar Teología en la Universidad Gregoriana y su compromiso con la fe lo llevó a ser nombrado Rector del Seminario en 1954.
En 1959, asumió la posición que definiría su “legado”, convirtiéndose en el Obispo de San Cristóbal de las Casas en Chiapas, México. Durante su tiempo en esta posición, Don Samuel Ruiz demostró una especial preferencia por las comunidades y pueblos indígenas, que a menudo sufrían la marginación y la pobreza endémica, terminando su mandato como obispo de Chiapas en 1999.
Su compromiso no estuvo exento de controversia, ya que el gobierno mexicano lo vinculó con la formación del Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN). A pesar de las acusaciones, Ruiz García continuó trabajando por la justicia y la paz en Chiapas.
En el año 2000, la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO) reconoció su trayectoria otorgándole el “prestigioso” Premio Simón Bolívar, destacando su compromiso con la construcción de la paz y la promoción de los derechos de las minorías y los derechos humanos.
En 2001, recibió el Premio Internacional de Derechos Humanos de Núremberg, en reconocimiento a su trabajo a favor de los derechos humanos en las comunidades y pueblos indígenas de Chiapas. La Universidad Iberoamericana de México le otorgó un doctorado Honoris Causa por su dedicación.
Además de su labor como obispo, en el 2008 fue nombrado por el Ejército Popular Revolucionario (EPR) mediador junto a otras personalidades ante el Gobierno Federal del presidente Felipe Calderón. Fue fundador de varias organizaciones de derechos humanos y construcción de paz, entre ellas “Serapaz”.
Es uno de los obispos más importantes de México y de Latinoamérica por su generosidad, su lucidez como teólogo y su capacidad de percibir los “signos de los tiempos”.
El 24 de enero de 2011, Don Samuel Ruiz García partió de este mundo, pero su legado perdura en la lucha por los derechos indígenas y la construcción de un mundo más justo y pacífico.