Pénjamo, Guanajuato.- Ignacio Cervantes originario de Pénjamo contó cómo ha sobrellevado este regreso a las actividades después de 2 meses de no poder vender su mercancía por la contingencia del COVID-19.
23 años son los que respaldan a este comerciante que se encuentra vendiendo fruta en la zona centro de Pénjamo.
Don Ignacio conto que le afecto mucho no poder vender durante 2 meses y aunque al principio fue apoyado con una despensa del gobierno, la cual contenía 1 botella de aceite, 2 kilos de frijol, 1 kilo de harina, 1 kilo de azúcar y un jabón de tocador.
“Ahora que fui a pedir mi despensa no me dieron nada pues me dijo el encargado que ya no se me va a dar pues ya estoy trabajando, a lo que yo le respondí que si pero trabajo solo en los días que me dejan y en el horario establecido” externó.
Por otro lado el penjamense muestra su desesperación al ver que el centro aún sigue clausurado de algunos puntos y la gente no puede circular.
“No hay ganancia, de los 250 pesos que invertí a lo mucho llevo 150 pesos ganados, no nos dejan trabajar diario” contó.
Cabe mencionar que el gobierno les iba a prestar un dinero que nunca llego mencionó Ignacio.
“No sabemos cuánto dure esto pero vamos a estirar el pesito hasta donde se pueda para salir adelante” concluyó.