Por Edgar Reza.
Guanajuato, Gto.- Tradición que data de mediados del siglo XVIII, luego de que se terminó la construcción de la presa en el año de 1749, como cada temporada de lluvias se desaloja el exceso de agua y las compuertas de la Presa de la Olla se abren formando una espectacular cascada.
La presa de la Olla es uno de los principales atractivos turísticos de la capital guanajuatense y surge esta tradición de abrir sus compuertas al reunir al pueblo guanajuatense en el parque Florencio Antillón, como cada año, en el mes de julio.
Cabe destacar que esta tradición se ubica para los guanajuatenses dentro de las Fiestas de San Juan, y da comienzo como cada año al ondear un pañuelo blanco cuando se abren las compuertas de este emblemático vaso de captación para desalojar el agua sobrante por el cauce del río Guanajuato.
Se trata pues de un evento orgullosa y significativamente guanajuatenses en el que las familias reunidas disfrutan de un programa cultural, y de calado social, ambientado con notas musicales de la banda del estado interpretando el vals “Sobre las Olas”, obra del compositor guanajuatense, Juventino Rosas.
