Las Poquianchis: El horror oculto tras los burdeles de Guanajuato
Durante casi dos décadas, las hermanas González Valenzuela explotaron y asesinaron a decenas de mujeres en una red de trata que estremeció a México
Guanajuato.- Las hermanas Delfina, María de Jesús, Carmen y María Luisa González Valenzuela, mejor conocidas como Las Poquianchis, dirigieron una de las redes de trata y explotación más macabras de la historia de México entre 1945 y 1964. Sus principales burdeles estuvieron ubicados en San Francisco del Rincón, Purísima del Rincón y León, Guanajuato, además de Lagos de Moreno, Jalisco.
Se calcula que secuestraron y explotaron a decenas de mujeres, principalmente jóvenes engañadas con falsas ofertas de trabajo como empleadas domésticas. Muchas de ellas fueron sometidas a condiciones inhumanas, y cuando enfermaban, envejecían o se negaban a seguir trabajando, eran asesinadas y enterradas en fosas clandestinas dentro de sus propiedades.
El caso salió a la luz en 1964, cuando una de sus víctimas logró escapar y alertó a las autoridades. En los registros oficiales se documentaron más de 90 víctimas, aunque se presume que la cifra real podría ser mayor.
Las hermanas González Valenzuela, fueron arrestadas en 1964 y sentenciadas en 1965. Delfina González Valenzuela falleció en prisión en 1968, se tienen algunos datos de que probablemente en Irapuato. María Luisa “Eva” González Valenzuela murió en 1984, mientras que María de Jesús González Valenzuela falleció a mediados de la década de 1990. Carmen González Valenzuela, por su parte, murió en 1949. De todas ellas, María Luisa fue la única que obtuvo su libertad tras cumplir su condena.
Este caso marcó un antes y un después en la historia criminal de México, evidenciando la falta de regulación en la explotación de mujeres y los vacíos legales que permitieron que esta red operara impunemente durante casi dos décadas.
