Manuel Doblado, Guanajuato.- Juanita Ramírez Flores, de 60 años de edad, lleva más de 40 años siendo parte importante de la Ferretería “Casa Álvarez”, de Ciudad Manuel Doblado, atendiendo con su amabilidad y picardía a todos los clientes que la visitan.
“Yo empecé a aprender con don Jorge Álvarez y la señora Martha Álvarez, los dos me enseñaron mucho y siempre voy a estar agradecida porque me abrieron las puertas de esta casa”, externó Juanita
La dobladense es una mujer con mucho carisma y vitalidad, la “Casa Álvarez” ha sido su hogar por muchos años y por sus pasillos han desfilado infinidad de clientes que Juanita recuerda con mucho cariño.
“Aquí han pasado muchos clientes que yo aprecio mucho, la verdad este trabajo me ha dejado muchas satisfacciones y muchos momentos divertidos, me acuerdo de que cuando comencé a trabajar aquí y a veces no me coincidía el corte, le decía a don Jorge, ‘oiga don Jorge, no me salió el corte’ y él me decía ‘quítese los zapatos y échese una maroma’, y nos daba mucha risa” explicó.
Para Juanita, el trabajar en esta tradicional Ferretería ha sido un placer y espera poder seguir muchos años más.
“La gente es bien agradable conmigo, no voy a negar que a uno u otro le he de caer mal, pues no soy monedita de oro, pero la gente me habla, me respeta, me quiere y eso a mí me hace sentir de lo más bonito, voy en la calle y me saludan, gritan mi nombre y me siento especial, aquí me han enseñado muchos valores y por siempre estaré agradecida con el señor Gustavo Álvarez por permitirme seguir aquí” finalizó