Irapuato, Guanajuato.
“Es una experiencia de amor, preciosa, hay veces que uno viene en las jornadas, que ya no puede; hay veces que ya no puedo y me siento completamente, y digo ” ¡Ay dios ayúdame porque si tú me dejas no voy a salir”, así es como Laura Sánchez define su experiencia en su peregrinación hacia la Virgen de San Juan de Los Lagos.
Una mujer de 50 años, Laura Sánchez ha caminado cinco días, salió desde la Cañada El Marqués, Querétaro y su fe en Dios y en la Virgen de San Juan de Los Lagos le han dado la fuerza para continuar hacia su destino.
“Jesús me está llevando de la mano, yo le digo a la virgen ¡Ay virgencita si tú me dejas, aquí me voy a quedar, ay señor jálame con tu manita divina”, expresa con una gran emoción.
Laura Sánchez explica que una experiencia de esta magnitud sólo se tiene que vivir para conocer, la cual ha sentido durante 15 años consecutivos.
Cuenta que el año pasado lo hizo además de por su fe, fue porque traía una manda, sería abuela por primera vez, “y sí gracias a Dios fui abuela. Este año mi mamá falleció en agosto y es otra manda, pues yo le pedí mucho a la virgencita que me ayudara a sacar adelante a mi mamá, afortunadamente falleció pues porque ella se fue agusto, la encomendé mucho a la Virgen de San Juan de Los Lagos”.
Durante su paso por Irapuato, Laura platica que durante los cinco días de su recorrido, la gente ha sido muy dadivosa, los ha apoyado mucho a ella como a sus compañeros, les han ofrecido de comer frijoles, chicharrón, tortas de camarón, sopa aguada, arroz, nopales, refresco, agua pura, yogurt, entre otras cosas, “afortunadamente tenemos mucha providencia en el camino, la gente responde”.
Para asearse la gente les ha dado permiso de entrar a sus casas para bañarse, ya sea que les cobren o no, lo han hecho diariamente.
“Ojala que tengan la oportunidad de conocer estos caminos porque son preciosos, necesita uno vivirlo para saber realmente lo que es el amor a Dios”.
