Por Alice Juárez.
En los últimos años, el grooming se ha convertido en una preocupación creciente en el ámbito de la seguridad en línea.
Pero, ¿qué es el grooming? Básicamente, se trata del acoso que una persona adulta ejerce sobre un menor de edad con fines de abuso sexual, y este proceso se divide en varias etapas:
- Creación de un vínculo de confianza
- Aislamiento de la víctima
- Evaluación de posibles amenazas o peligros
- Conversaciones de índole sexual
- Peticiones de naturaleza sexual
Expertos en ciberseguridad advierten que los delincuentes suelen utilizar tácticas sofisticadas para manipular a sus víctimas. Estas tácticas pueden incluir el uso de perfiles falsos y la creación de un entorno de confianza que les permite avanzar hacia situaciones de abuso. Además, muchas veces los agresores se hacen pasar por personas de la misma edad o comparten intereses similares con la víctima para facilitar la manipulación. Es de vital importancia que padres y educadores mantengan un diálogo constante y abierto con los menores sobre sus experiencias en internet, reforzando el conocimiento de los peligros a los que están expuestos en las redes sociales.
Es alarmante el crecimiento registrado de casos de grooming en América Latina. Según un informe reciente de la Asociación Internacional de Protección Infantil, durante el último año, un 40% de los jóvenes de entre 12 y 17 años encuestados admitió haber recibido mensajes inapropiados de desconocidos en redes sociales. Este dato revela la urgencia de abordar el tema y fomentar una mayor educación sobre los riesgos que conlleva la interacción en línea.
Es urgente que, como sociedad, estemos conscientes y documentados acerca de este tema, que lejos de ser una tendencia, es una problemática que ha existido siempre, pero que ahora, con el uso masivo de las redes sociales, ha resultado aún más fácil para quienes cometen estos delitos. Es de suma importancia implementar programas de concienciación y prevención, en los que se enseñe a los niños y jóvenes a identificar conductas de riesgo y a proteger su privacidad en línea.
Asimismo, las autoridades señalan la importancia de denunciar cualquier sospecha de grooming, ya que muchas veces los agresores actúan en múltiples plataformas y pueden tener más víctimas bajo su control. La colaboración entre instituciones educativas, familias y autoridades es fundamental para crear un entorno digital más seguro.
A medida que la tecnología avanza y las plataformas digitales se vuelven más accesibles, el grooming se presenta como un desafío que requiere atención inmediata. La prevención, a través de la educación, se perfila como la herramienta más eficaz para proteger a los menores en el mundo digital.
