El Parlamento francés decidió una prohibición ampliada de los teléfonos celulares en las escuelas, informó la radio Franceinfo por la votación de la Asamblea Nacional.
Los teléfonos celulares, y cualquier dispositivo de cómputo móvil con conexión a Internet, fueron expulsados de los salones de clase de educación primaria y secundaria.
El Parlamento galo adoptó la medida de forma definitiva en los centros de educación primaria y secundaria, una promesa de la campaña del presidente Emmanuel Macron.
Los diputados de la mayoría presidencial y del centro votaron a favor de este texto durante su última votación en la Asamblea Nacional, la Cámara baja del Parlamento, mientras que la derecha y la derecha se abstuvieron, criticando una “operación de comunicación” que “no va a cambiar nada “.
Este proyecto de ley prohíbe el uso de todo aparato conectado (celulares, tabletas, relojes) en las escuelas y colegios, es decir los centros de educación secundaria que por lo general acogen a niños de hasta 15 años.
Habrá excepciones “para el uso pedagógico”, así como para los niños discapacitados, se anunció.
En lo que concierne a los cursos superiores (entre 15 y 18 años), cada institución puede decidir si adopta o no la medida, y si lo hace de forma parcial o total.
La ley francesa prohíbe desde 2010 los teléfonos celulares “en cualquier lugar y en el interior”.
El ministro de Educación, Jean-Michel Blanquer, que estimaba que esto no se cumplía plenamente, aplaudió esta nueva ley “de entrada al siglo 21” y que “envía un mensaje a la sociedad francesa”, pero también al extranjero, donde “otros países han demostrado su interés “.
En el capítulo dedicado a la Educación del programa electoral de Macron, elegido presidente en mayo de 2017, figuraba la prohibición de los celulares en las escuelas de primaria y secundaria.
El presidente de Francia, Emmanuel Macron, anunció en Twitter que la Asamblea General aprobó la prohibición de los teléfonos celulares en las escuelas.