El “Profe Rafa” 25 años dedicados a enseñar a niños la Lázaro Cárdenas

Rafael Morales profesor de las escuelas José J. Mujica y Matías Romero, en Irapuato

Irapuato, Guanajuato.- El profesor Rafael Morales quien falleció hace más de tres años, dedicó veinticinco años a la enseñanza de los niños de la colonia Lázaro Cárdenas y alrededores, así lo contó Gabriel Morales quien es hijo del profesor.

El maestro Morales trabajó en las escuelas José J. Mujica y Matías Romero, de la cual fue uno de los maestros fundadores junto con la directora de la escuela la maestra Socorro, recordó su hijo.

Él era una persona a la cual se le acercaban muchas más a pedirle ayuda o consejo, era un maestro, una guía a seguir, no solo por sus alumnos, sino por muchas personas más.

Una vez Gabriel lo acompañó a la escuela y se sorprendió de cómo el profesor Rafael era con sus alumnos, eras mucho más rígido que en casa y dijo que:

“Era gritón, todavía era de los maestros que les daban algún correctivo a los alumnos pegándoles con el borrador en las palmas de las manos. Pero los mismos papás de los alumnos le decían que si era necesario reprender al niño lo hiciera.”

Cosa que le sorprendió mucho a Gabriel pues en casa el profesor jamás le pegó a él o a sus hermanos, pero a sus alumnos además de el borrador también les daba un reglazo con el metro de madera.

Como padre el profesor Morales engendró a tres hombres, Gabriel, Erick y Cristian, así mismo era un padre al cual le gustaba tener tiempo para jugar con sus hijos, pues Gabriel recordó que en su caso particular jugaban a hacer carreteras para los cochecitos, pero en el caso de sus hermanos el profesor jugaba al fútbol y a con otro de sus hermanos pasaban el tiempo haciendo manualidades.

“Era un padre que siempre se daba el tiempo para estar con nosotros a pesar de su doble plaza, además de siempre andar buscando a donde salir los fines de semana y de varias vacaciones que pasamos juntos”, señaló Gabriel.

El hijo del profesor mencionó que tiene una imagen de su padre como un hombre severo, pero justo; cuando regañaba siempre buscaba explicar a sus hijos la razón por la cual eran reprendidos, jamás hubo un regaño injusto señaló el mayor de sus hijos.

Una de las cosas que el hijo del maestro recuerda es que a pesar del concepto que él tenia de su padre como una persona seria, recta, fuerte y severa, en dos momentos lo vio derrumbarse y soltar el llanto, “fue un shock” mencionó Gabriel; una de las ocasiones fue cuando murió la suegra del maestro y en otra cuando estaba enfermo de gravedad y se despidió de él y de sus familiares, pues los médicos lo habían desahuciado, finalmente se recuperó y murió años después.

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