León, Guanajuato. El cañón de Alfaro en León en esta temporada, emula un sitio en el que la naturaleza se encuentra en parte libre de la contaminación del ser humano, al menos de basura, siendo un espacio hermoso.
Caminar por los senderos de la zona llamada Los Alfaro, muestra árboles frondosos, pequeñas pozas de agua, cascadas y caídas de agua que, aunque son hermosas, pueden ser peligrosas para aquellos que no conocen del lugar o que pretenden aventurarse sin conocimientos de senderismo, escalada o rappel.
En la parte media del cañón, exista una gran cueva que posiblemente se trataba de un tiro de mina, donde a simple vista se puede observar que se encuentra encharcada y posiblemente inundada.
Lo interesante de este lugar, aparte de su río de agua fría, es el aire que se respira, las grandes rocas que se observan a su alrededor, las aves y las plantas que lo enmarcan, aunque hay pequeños restos de basura que visitantes tiran y no respetan uno de los lugares que siguen siendo patrimonio natural de los guanajuatenses.