Monterrey, Nuevo León.- La fuerza de los vientos de los huracanes golpearon en junio del año 2010 la ciudad de Monterrey Nuevo León, el huracán “Alex” trajo consigo rachas de hasta 175 kilómetros por hora convirtiéndose en categoría 2 y que a su paso dejó 51 personas muertas en Centroamérica, Sur de Texas y en el norte de México.
Este huracán se llevó entre sus vientos una gran estructura metálica de doce metros de alto por tres de ancho de la Santísima Virgen de Guadalupe bendecida por San Juan Pablo ll en su segunda y última visita a la ciudad de Monterrey, nadie sabía de su paradero después de que “Alex” la había desaparecido entre sus vientos, las autoridades se dieron a la tarea de buscarla con escáner pero nunca dieron con ella, pasó el tiempo y la gente la dio por perdida.
Casi 10 años más tarde, el 26 de julio, las calles de Monterrey fueron inundadas por el huracán “Hanna” ya degradado a tormenta tropical, sus vientos fueron débiles pero hubo una muy intensa lluvia.
Según los reportes de Protección Civil, ése día llovió el 80 por ciento de lo que llueve en todo un año en esa ciudad y del lecho del Río Santa Catarina una vez que había desalojado el caudal de “Hanna”, apareció un trozo de estructura metálica que se asemejaba al de la Virgen.
Fueron los habitantes cercanos al lugar los que dieron aviso a las autoridades y comenzaron los trabajos para rescatar la Virgen, interpretando esta recuperación como una señal milagrosa, quizá el fin próximo de la pandemia.
