
Guanajuato, Guanajuato. Javier de Jesús Hernández, Capelo, es prolífico y disruptivo, con una obra que va de lo clásico a lo icónico y de lo tradicional a lo abstracto y de la cerámica al metal. Actualmente son exhibidas dos colecciones de su creación: Bestiario y Torque.
La primera son leones colocados en la Plaza de la Paz y la segunda está compuesta de una serie de figuras abstractas de tótems, colocadas en la Plaza de las Ranas, en la zona conocida como “Los Pastitos”. La modernidad de su propuesta plástica podría ser integrada al paisaje urbano de Guanajuato, pero requiere el aval del Instituto Nacional de Antropología e Historia.

El artista calificó a sus obras como “una invitación abierta a la reflexión, al diálogo y a la interacción con el arte en su forma más pública y cotidiana”.
Las obras son parte de una iniciativa del Museo de Arte Contemporáneo Primer Depósito, que, en alianza con el gobierno de Guanajuato, lleva el arte a las calles.
Torque de los Tótems se integra al paisaje visual junto a las ranas de cantera que permanecen en la plaza, creaciones de cantereros locales que le rinden homenaje a la identidad onomástica de la ciudad. La obra de capelo ahí expuesta es un conjunto de esculturas abstractas realizadas en acero, que representan conceptos como espacio e identidad.
“Las piezas dialogan entre sí y con su entorno, estableciendo una conexión espacial que promueve la intimidad pública” señalan los curadores de la muestra. Añaden que su nombre remite a nuestras raíces culturales y espirituales, “convirtiéndose en un símbolo de nuestra esencia ancestral y nuestra identidad”.
Bestiario son dos enormes esculturas de leones, elaboradas en bronce a la cera perdida. Son representaciones con un estilo expresionista, realizados en la línea de otras obras del artista, como los caballos de la muestra “Kapadokia”, que fueron colocados al pie de la escalinata del edificio central de la Universidad de Guanajuato, y los “Toros arqueológicos” que estuvieron hasta enero pasado también en la Plaza de la Plaz.

Las exposiciones son parte de las celebraciones por el decimotercer aniversario del Museo de Arte Contemporáneo Primer Depósito. Cabe aclarar que la colocación de los leones no tuvo el permiso del Instituto Nacional de Antropología e Historia.
Si bien en la ciudad hay obras permanentes, representadas como arte abstracto, como lo es la réplica de “La Giganta-Dulcinea”, obra original de José Luis Cuevas, la integración al paisaje arquitectónico de toda propuesta plástica debe contar con el aval de expertos del organismo.
Si las obras de Capelo pasan a ser propiedad del municipio, deberán solicitar la intervención del INAH para ver en qué espacios pudieran ser colocadas.
