Guanajuato, Gto.- la segunda planta de una antigua casa en el Paseo de la Presa y un terreno sólo bardeado, de unos 1,200 metros cuadrados de extensión, ubicado en la carretera a Puentecillas, son las propiedades que el virtualmente desaparecido Partido de la Revolución Democrática (PRD) tiene en la ciudad de Guanajuato.
Ambos inmuebles son parte de una serie de propiedades que el partido, en proceso de pérdida del registro al no haber alcanzado el 3 por ciento de la votación en el pasado proceso electoral, que -en conjunto- están valuadas en unos 250 millones de pesos.
Al confirmarse la pérdida del registro -una vez que el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) resuelva los recursos de inconformidad presentados por el partido-, los bienes serán rematados para la liquidación de personal y el pago de adeudos. Si quedan bienes sin rematar, serán entregados al Instituto para Devolver al Pueblo lo Robado (INDEP).
En el caso de Guanajuato, la dirigencia estatal había dispuesto que los bienes que tuvieran en la entidad pasaran a dominio de la Universidad de Guanajuato, pero esa voluntad carece de sustento legal.
Los bienes para resolver los males
El PRD cuenta con inmuebles en varias partes del país, principalmente en la Ciudad de México:
El de mayor valor es el edificio donde está su sede nacional -calle Monterrey 50-, con un costo de 160 millones de pesos, seguido de la sede histórica -Benjamín Franklin 87-, valuada en 25.4 millones de pesos.
Tiene otras propiedades, ubicadas en Durango 338, colonia Roma Norte; en Bajío 16, en la misma colonia; tiene otra en la calle Odontología 76, colonia Copilco Universidad; y en Refinería Minatitlán 22 y 26, colonia Petrolera Taxqueña, Ciudad de México.
En total, suman unos 220 millones de pesos, de acuerdo con valoraciones comerciales, según estima el Instituto Nacional Electoral (INE)
Ángel Ávila, representante legal del PRD, declaró que pelearán en Tribunales para mantener el registro.
Mientras el TEPJF resuelve los recursos interpuestos, un equipo especializado del gobierno federal comenzó a evaluar los bienes del partido para, en caso de su desaparición legal, rematarlos y pagar liquidaciones de trabajadores y deudas. Si queda algún bien “sobrante”, será entregado al INDEP,
El interventor Ricardo Badín Sucar rastrea registros de oficinas, vehículos, bienes muebles e inmuebles o cualquier adquisición del PRD en tres décadas de existencia, así como las cuentas bancarias del partido, contratos vigentes, deudas a proveedores, personal contratado y los juicios laborales o civiles que vienen arrastrando desde hace 20 años.
El PRD impugnó los 300 distritos electorales. La Ley General de Partidos Políticos establece una ruta legal para vigilar que no sean enajenados los bienes y recursos para la eventual liquidación.
El artículo 95 de la Ley General de Partidos Políticos estipula que la Junta General Ejecutiva del INE emitirá la declaratoria de pérdida de registro, pero hasta que el TEPJF lo valide después de las impugnaciones, empezará el proceso de liquidación en el que el PRD debe cumplir con las obligaciones fiscales, financieras y administrativas.
Lo que hay en Guanajuato
En el estado de Guanajuato, el PRD tiene la planta alta y el terreno mencionados, además de 5 vehículos y equipo de oficina.
La planta alta corresponde a una casa ubicada en el 104 de Paseo de la Presa, esquina con el callejón del Refugio.
José Luis Barbosa Hernández, fundador y exdirigente del partido, explicó que fue adquirida a principios de la década de 1980, cuando el Partido Comunista Mexicano (PCM) se convirtió en Partido Socialista Unificado de México (PSUM), ambos antecesores del PRD.
La compra fue sólo de la planta alta, pagada con aportaciones periódicas y a un costo accesible para su época debido a que la finca se encontraba en muy mal estado. La finca fue sede del Comité Ejecutivo Estatal del PSUM, luego del PMS (surgido de la fusión con el Partido Mexicano de los Trabajadores) y luego del mismo PRD (surgido de la fusión del PMS con otros partidos de izquierda y ex priistas) hasta principios del actual siglo, cuando la sede estatal se trasladó a una finca que el partido rentaba en el callejón de Jalapita, en la zona de Marfil. La planta alta de la casa de Paseo de la Presa fue sede durante algunos años del Comité Ejecutivo Municipal del Partido hasta que, previo a la elección de 2018, fue cerrada.
El terreno es de UNOS 1,200 metros cuadrados y cuenta con una barda perimetral profunda, con cimentación lista para construcción. Se ubica en la carretera a Puentecillas, a un costado de la sede del Instituto Electoral del Estado de Guanajuato.
Fue adquirida en 2012 bajo la dirección de Baltasar Zamudio Cortés para la construcción de la sede estatal del partido, obra que nunca se realizó. La inversión en ese momento superó los ocho millones de pesos.
El costo comercial del metro cuadrado en la zona llega a los 3 mil 500 pesos, sin contar el costo de la barda, que tiene cimentación profunda. Sin embargo será el INE y su cuerpo técnico financiero el que determine el valor tanto del terreno como de la casa para su eventual remate.
La liquidación del personal de planta que laboraba en el partido será realizada con los recursos del remate total de bienes, por lo que no necesariamente los de la ciudad de Guanajuato podrían ser comprados.
La disposición de la dirigencia estatal fue que el terreno, en caso de tener que ser enajenado, pasara a la Universidad de Guanajuato. La ley, empero, señala que el INE lo tendrá que devolver a la federación y la dinámica es que, en caso de no ser rematado, pase al INDEP.