Eran las diez de la noche, y en la parada del camión conocida como la Ford, más de 20 personas que viajaban en autobús recibieron un “regalo de reyes”, pues se tuvieron que bajar de la unidad y caminar a sus casas, luego de que sufrieron un accidente tipo choque que afortunadamente no dejó lesionados, pero varias personas molestas.
El camión con número GU-0099 había salido de la Central de autobuses y al momento de avanzar, un vehículo con placas GMY-85-79 le pegó, generando un accidente de tránsito que a su vez iba a ocasionar un conflicto vial.
El presunto responsable que iba manejando, viajaba con una joven y su hijo en el asiento del copiloto, traían la música a alto volumen; al momento del incidente se bajó de la unidad y en lugar de pedir una disculpa empezó a exigirle al chofer del autobús que le pague los daños.
A la brevedad tres policías de tránsito municipal con nombre Erick Rangel y Suriel Barrera ponen orden y revisan el accidente automovilístico dando un diagnostico que el autobús no estaba en su carril.
Los pasajeros que aún estaban en el interior del camión y que se dirigían a la zona centro de Guanajuato, tuvieron que bajar del autobús ya que el camión iba ser llevado al corralón; uno de los pasajeros expresó su molestia con los tránsitos de vialidad dijo “pero si el carro tuvo la culpa, que hace ahí en ese lugar, que no ven que el carro está mal ubicado”.