Irapuato, Guanajuato. – El encuentro deportivo entre el Club Deportivo Irapuato y Petroleros de Salamanca, se vio empañado por incidentes de violencia que involucraron a la familia de Ariel González “El Apache”, ex jugador del Irapuato, y a un sector de la afición al final del encuentro.
Los problemas comenzaron cuando Pablo González jugador de Salamanca e hijo de “El Apache” se acercó a su familia para tomarse una foto del recuerdo, un acto común en los eventos deportivos.
Sin embargo, algunos miembros de la afición no recibieron esto con agrado y comenzaron a agredir a los hijos de “El Apache”, lanzándoles cerveza, empujones, escupitajos e incluso golpes.
La situación se volvió insostenible para la familia de Ariel González, y sus hijos se vieron obligados a saltar al terreno de juego para protegerse de los ataques.
Sin embargo, no fueron los únicos afectados, ya que también se registraron incidentes de violencia entre la afición de Salamanca y la porra de Irapuato.
La tensión entre los aficionados de ambos equipos desencadenó una serie de enfrentamientos que llevaron a la intervención de los elementos de seguridad, quienes tuvieron que evacuar a la afición de Salamanca antes de que concluyera el encuentro para “garantizar” su seguridad.
La rivalidad en el deporte es común, pero la violencia no debe ser tolerada, se espera que las autoridades tomen medidas para prevenir futuros episodios de este tipo y fomentar un ambiente seguro y amigable en los eventos deportivos.