Irapuato, Guanajuato.- Gizell Belman de 11 años de edad, originaria de Irapuato, es estudiante de sexto de primaria con excelentes calificaciones, ha tenido la oportunidad de estudiar ballet, piano, y actualmente pertenece a una academia de baile de hip hop, es admiradora de Billie Eilish y Black Pink, dice que de grande le gustaría estudiar “astronomía” porque le intriga todo lo que tenga que ver con los planetas y el universo.
Uno de sus pasatiempos favoritos de Gizell durante esta pandemia, ha sido crear historias y personajes que después les da vida en modo caricatura, editando ella misma sus videos, otro de sus hobbies es escribir historias de terror de su propia autoría inspirada en algunas películas de Guillermo del Toro.
“En mi mente tengo muchas historias guardadas, pero por el momento solo 4 están escritas en pequeños libros que tal vez, algún día, se conviertan en película” dijo Gizell, compartiéndonos la primera parte de su historia más reciente titulada “Solos en casa”.
Nunca sabes quienes son las personas que te rodean…
Un día normal, los padres de Lele, Fernán, Shimer y Manuel, tienen una fiesta en la noche, dejando a sus hijos en casa, los padres consideraban que eran lo suficientemente grandes para cuidarse solos, pero cometieron un gran error. 10:33 pm, sus padres salen de casa… ¡bye niños, cuídense mucho y no hagan desastres!
¡Adiós! Se despidieron los chicos felizmente, pues era hora de disfrutar la noche, comer dulces y jugar videojuegos. 10:33 de la noche, no era muy tarde, pero si peligroso para cuatro niños solos quienes se aseguraron de cerrar todas las puertas y ventanas; ¡ahora si juguemos videojuegos! exclamaron los niños quienes rápidamente se les fue el tiempo, todo estaba tranquilo, pero algo los interrumpió.
11:33 pm, se escuchó un estruendo por toda la sala, los chicos voltearon rápido hacia atrás y se había caído un jarrón con flores que estaba en el centro de la mesa, Fernán estaba asustado, pero todos pensaron en lo más lógico, el aire lo tiró. Después de recogerlo, se quedaron en silencio. Shimer dijo, oigan, las ventanas están cerradas ¿cómo lo tiró el aire? Manuel respondió, tal vez estaba a la orilla de la mesa. Lele: no, hace rato volteé y lo vi en el centro de la mesa.
Era muy extraño, pero no le dieron importancia, siguieron en lo suyo, grabaron tiktoks, vieron videos de risa y Fernán se había quedado dormido en el sillón.
12:33 am, algo extraño sucede. Tocaron la puerta, los chicos se miran sorprendidos, Manuel: tal vez sean nuestros papás. Lele: no, ellos quedaron en hablarnos antes de que llegaran. Los chicos se levantaron mientras Lele caminaba lentamente hacia la puerta, pero sintió que tocaron su hombro, se dio la vuelta rápidamente y era Manuel.
Manuel: Lele, es peligroso yo abro, Lele asintió con la cabeza y retrocedió, Manuel camino lentamente a la puerta pensando en abrir o no, pero los toquidos se hacían más fuertes, abrió deseando que fueran sus padres, pero no, era una niña de aproximadamente 5 años, tenía cabello negro, de piel pálida y vestido rosa, – he perdido a mi mamá, ¿me ayudan a buscarla? dijo la niña con voz dulce.
Manuel: lo siento, pero es demasiado tarde para andar en la calle, mejor, si te sabes algún número le llamo a alguien de tu familia, -no se ningún número replicó la niña con una sonrisa perturbadora que dejó a todos helados, Manuel cerró rápidamente la puerta, todos estaban confundidos, mientras tanto, Fernán se despertó de un brinco, asustado, corre y abraza a Manuel, ¿qué pasó Fernán? Fernán: estaba soñando feo. ¡Eso te pasa por comer tantos dulces! dijo Shimer entre risas. Bueno, todo era muy extraño y Fernán no paraba de llorar, aunque lo intentaban calmar.
01:33 am Tocan la puerta, Manuel se levanta para abrir, pero Lele lo detiene ¿estas loco? no abras le dijo. Ya no se escuchaban toquidos sino patadas como si alguien necesitara ayuda, Manuel tomó las llaves y abrió la puerta rápidamente, otra vez era la niña – no he encontrado a mi mamá y tengo hambre, ¿me das leche? dijo la niña con voz frágil, Manuel corrió hacia la cocina le dio un vaso con leche, ella la tomo y se fue sin decir ni una palabra.
Todos se miraron con miedo. Manuel: bueno… ¿Quién tiene hambre? Ya habían encargado pizza y sushi para cenar, así que prepararon la mesa y se sentaron a cenar, todos estaban muy callados y el ambiente se sentía tenso, a Fernán se le cayó la pizza al suelo y todos se rieron, regresando todo a la normalidad, Fernán nuevamente se quedó dormido y los otros chicos aprovecharon para jugar videojuegos de terror.
02:33 am, Shimer: ¡aaah! Lele: ¡shh! No grites vas a despertar a Fernán, sonó el teléfono y todos estaban felices porque pensaron que eran sus padres quienes los llamaban, contestó Manuel: ¿bueno? Nadie respondió… Manuel estaba a punto de colgar, pero escucho claramente una voz que sonaba satánica gritando “ayúdame”, colgó muy asustado rápidamente el teléfono, Shimer: ¿Qué pasó? Nada, no eran nuestros papás dijo Manuel ya mas calmado, pensando que se trataba de una broma, el ambiente ya no era el mismo, sentían una vibra negativa y se sentían observados.
Shimer miró de reojo el reloj, ya eran las 03:33 am, tocaron de nuevo la puerta, los chicos ya estaban decididos a no abrir hasta que recibieran la llamada de sus padres, pero el toquido era insistente, lnuevamente era la niña, diciendo encontré a mi mamá, Manuel: ¡me alegro! – Encontré a mi mamá, pero muerta, dijo la niña con una sonrisa perturbadora de oreja a oreja, al oír eso, Manuel cerró la puerta, pero un charco de sangre lo salpicó oyéndose un crujido, volvió a abrir la puerta de nuevo y para su sorpresa le había cortado los dedos a la niña por accidente…
La historia de “Solos en casa” no termina aquí, es solo la primera parte de un mini libro que, de acuerdo con la escritora, está creando los personajes en caricatura, mediante varios programas de deseño y edición que ella misma ha conseguido y aprendido a base de tutoriales por internet.