Irapuato, Guanajuato.- Volvieron a revivir su tiempo de juventud quienes, en su momento, fueron integrantes de la Rondalla Femenil de la Prepa Oficial. Se reencontraron para hacer sonar de nuevo las guitarras y entonar las melodías que fueron el escenario de sus momentos más románticos.
Rosalba mencionó que las redes sociales hicieron posible este reencuentro, pues desde hace varios años han estado en comunicación: primero por Hi5, después por Messenger de Hotmail, hasta que llegó Facebook, y fue ahí donde más compañeras pudieron ser contactadas y, de alguna manera, continuar con la amistad nacida en la juventud.
Uno de los recuerdos más significativos que tienen como parte de esta agrupación musical fue cuando recibieron la invitación para cantar en el área femenil del CERESO de Irapuato, una experiencia que no han olvidado.

“Recuerdo cuando llegamos, y al entrar a la cárcel tuvimos que ser registradas. Estar en ese ambiente, que desde que llegas tiene un olor peculiar… pasamos miedo. Es un lugar donde se respira soledad”, compartió una de las integrantes.
Las entonces jóvenes artistas comentaron que, en cuanto dieron la primera nota con sus guitarras, las internas entraron en ambiente; el miedo desapareció, y pudieron alegrar un poco la vida de aquellas mujeres que habían cometido errores y estaban pagando por ellos. La música les alegró ese día.
Esa fue una de las mejores experiencias que vivieron, pero no todo quedó ahí. También fueron pioneras en llevar serenatas a las mamás siendo un grupo femenil, y, por supuesto, no faltó la “aventada” que le llevó serenata al ser amado. Según cuentan, hasta el día de hoy siguen juntos y felices.

Así, este grupo formado por las exintegrantes de la Rondalla Femenil de la Prepa Oficial de Irapuato, generación 91–95, se reunió para rendir un homenaje al maestro J. Socorro López, quien fue el impulsor de la rondalla femenil en la preparatoria en aquellos años.