Abasolo, Guanajuato. – Elena Rodríguez, conocida como “Doña Elenita”, se convirtió en el pilar fundamental para sus nietas, quienes quedaron huérfanas aproximadamente hace 4 años.
Guadalupe “Lupita” Medina y María Dolores Medina, de 15 y 16 años, respectivamente, son las nietas de Doña Elenita, quien lucha día a día para llevarles comida y vestimenta a la mesa.
“Le ayudo a la señora a vender tamales, pero me regalan mucha ropita y ellas de ahí se visten, y la que me sobra la llevo a vender”, comentó Elena Rodríguez.
Cabe mencionar que Elena ayuda en un puesto de tamales y gorditas ubicado en una esquina afuera del mercado Lázaro Cárdenas en Abasolo.
Además, la señora Elena mencionó que siempre ha cuidado de sus nietas, “ellas ahí crecieron, su mamá nunca se salió de la casa”, agregó la vendedora de tamales.
También mencionó que mataron a su hija, la mamá de Lupita y Dolores, “la mataron; era policía y duró 9 años”, afirmó Elena Rodríguez.
Además de vender tamales, Elena se dedica a vender ropa en La Peña y trabaja como ayudante de limpieza en una casa.
Doña Elenita también resaltó que sus nietas, aparte de estudiar en la preparatoria, le ayudan a conseguir dinero para pagar sus útiles. Mencionó que cuando están de vacaciones, ellas se van al campo a trabajar y de ahí juntan dinero para sus útiles y mochilas. Aparte, ella les coopera para la inscripción y su uniforme.
