Irapuato, Guanajuato.- El camarógrafo Refugio Morales Estrada comentó que, en su oficio es importante tener un buen encuadre, “así se este cayendo el mundo”, como lo recordó en las tomas que cubrió aquel fatídico 19 de septiembre de 1985 en la Ciudad de México, cuando un temblor sacudió a la ciudad y la dejó en ruinas.
“En este oficio se cuentan historias desde la lente”, comentó Refugio Morales que en aquel terremoto le tocó grabar imágenes bastante dolorosas, sin embargo, no podía quebrarse, habría que seguir grabando y estar al pendiente de que la toma saliera lo mejor posible; “hay que hacer la chamba a pesar de ocasiones muy drásticas o terroríficas; esto no para, esto sigue y sigue”.
Las zonas que le tocaron cubrir al camarógrafo, aquel 19 de septiembre, fueron en el centro de la ciudad, como el hotel Ritz, varias vecindades en la colonia Morelos, además de un Cetis que era de siete pisos y toda aquella estructura quedó solo en un piso; registrando el dolor, pero también la solidaridad de los mexicanos.
La carrera de Refugio Morales comenzó siendo jala cables, para después pasar a ser microfonista y posteriormente comenzar a captar las primeras tomas detrás de la cámara, “mi formación fue cien por ciento lírica”.
Una vez que el artista de la lente configuró y dio muestras de su talento, llegaron las oportunidades para trabajar en cine y televisión; ya sea realizando “video homes” o doblaje, o cubriendo algún certamen de belleza, o evento deportivo.
El camarógrafo, tienen ya, una larga carrera de 45 años, en donde la mayor parte de su carrera la vivió en Televisa Bajío, y actualmente su centro de trabajo esta en TV4 desde hace 7 años.
El captador de momentos explicó que, el cine que ha realizado se ha centrado en la cámara de 16 milímetros, en donde la dificultad radica en que, “es una sola cámara la que esta grabando la acción, y no hay repetición de escenas, hay que estar constante mente cortando para cambiar de toma, pues no hay apoyo de otras cámaras”, hay que ser preciso; esto le ha permitido desarrollar una pericia para manejar la cámara de manera notable en los eventos en vivo.