
Tampico, Tamaulipas
La Jaiba Brava del Tampico Madero se coronó como campeón de la Liga de Expansión, venciendo a la Trinca Fresera del Irapuato un gol por cero, por la vía del penal, a minutos de terminar el segundo tiempo.
La primera mitad del encuentro de esta final transcurrió con un intercambio de fuerzas, por lapsos de tiempo la Jaiba Brava parecía incisiva y la defensa fresera tenía que aplicarse a fondo, pero en otros momentos el Irapuato se iba al frente y exigía a la defensiva tamaulipeca.
Ambos equipos querían definir el encuentro desde los primeros minutos, pero gracias a las buenas atajadas defensivas esto no fue posible y poco a poco ambos finalistas bajaron las revoluciones y se asentaron en la cancha siendo más estratégicos.

Cómo es normal en estás instancias la adrenalina y los nervios provocaron algunos dimes y diretes dentro de la cancha, sin embargo el árbitro logró contener a los jugadores y no trascendió a mayores y todo quedó en habladuría.
En la segunda parte de la gran final el primer equipo en ofender fue la Jaiba Brava que,en un disparo en los linderos del área puso en aprietos al “Gansito” Hernández que solo pudo observar como el disparo se escurría por un costado de su puerta.
Conforme avanzaban las acciones del encuentro la tensión por saber que un error sería determinante, ambos equipos se enfrascaron en un juego de dominio compartido.
En una avance claro por parte de Tampico, la defensa de Irapuato pudo sobreponerse y Elbis Sousa adelantándose al delantero Pedrosa logró desarmarlo y alejar el peligro.
Sin embargo la Jaiba Brava adelantó líneas y en dos ocasiones el arquero fresero tuvo dos buenas intervenciones que impidieron que los de casa se fueran al frente.

Tras el agobio que los tamaulipecos sostenían en contra del Irapuato, el “Borita” Alcantar echó mano de la banca y mandó un cambio tratando de asegurar más dominio en medio campo.
Posteriormente un centro al corazón del área de los jaibos, fue rematado por Doldán preocupando a la saga quienes solo vieron que el balón salió por un costado de la portería.
El Irapuato en un avance que la defensa de Tamaulipas logró contener, inmediatamente mandó un contragolpe que dejó al delantero cara a cara con el Gansito Hernández quien derribó al delantero jaibo y el árbitro no dudó a marcar la pena máxima.
Escoboza tomó el balón, lo colocó en el manchón penal, se enfiló, disparó y venció al portero fresero, marcando el único gol de la final y el gol del campeonato.
El técnico visitante metió toda la carne al asador, y en los cinco minutos de compensación el Irapuato se fue al frente, pero no fue suficiente y la Trinca se quedó con el subcampeonato.
