Miguel Márquez Márquez, gobernador de Guanajuato, presentó un informe de actividades muy largo, pero con mucho ahínco, pues de los números de la economía creciente de Guanajuato, daba pausas para enfatizar un proyecto con miras nacionales, donde el Estado aparece según él, entre las diez entidades con mayor crecimiento en el país.
Las palabras nación, México o con rostro humano, fueron repetitivas, inclusive y para que quedará bien claro “yo no soy ratero, ni corrupto” parte de las expresiones nacionalistas de Miguel Márquez Márquez en su quinto informe de gobierno, donde resaltaron más las caras de los gobernadores que los detalles de un informe plagado de economía, empleo y una gran cantidad de acciones en el plano industrial.
En el informe, la pasarela nacional estuvo encabezada por el ex gobernador de Puebla, Rafael Moreno Valle, el jefe de gobierno en México, Miguel Ángel Mancera, el jefe Diego Ceballos, el gobernador de Querétaro, Pepe Calzada, por mencionar a los gobernadores de mayor renombre en México.
Miguel Márquez entre sus palabras, habló de promesas cumplidas, de apoyo al campo, la creación de una línea de transporte, la llegada de armadoras, la construcción de un centro de rehabilitación para personas con capacidades diferentes, escuelas, el hospital más grande del Estado en León, pero lo de mayor relevancia, fueron sus dobles palabras.
En este informe, Miguel Márquez, duro mayor tiempo que años anteriores, pues denotó que quería que lo escucharán en el plano nacional y que sus palabras, fueran tomando otro sentido, pues no detalló a grnades razgos problemas sociales como las ejecuciones, el robo al tren, los feminicidios, el impulso a los campesinos de esos de a pie u otros tópicos que le pudieran causar incomodidad, aunque no tenía que preocuparse de nada, sin hasta el arzobispo estaba en su compañía y el líder nacional panista, Ricardo Anaya.
Un informe con los que pudieran sucederlo en el gobierno estatal, los que pudieran ser sus contrincantes en caso de buscar la presidencia de la República y algunos de los personajes que quieren un cargo político en el Estado, aunque hubo un detalle, los diputados priistas no se aparecieron, no fueron y con ello muestran que no están de acuerdo con sus acciones o de plano, fue una estrategia para poner en evidencia que ahora si darán batalla en las elecciones del 2018.