Irapuato Guanajuato.- A sus 20 años, María Teresa Hernández, es una de las pocas mujeres que forman parte del equipo de bomberos del municipio de Irapuato.
“Admiro mucho la profesión, soy enfermera técnica e ingresé siendo voluntaria, me llamó mucho el estar en la ambulancia, más que nada la atención pre hospitalaria” dijo María Teresa.
La bombero tiene un año colaborando con el equipo de trabajo, aunque al principio le fue difícil acoplarse, debido a que pensaban que no podría con las tareas.
“Al principio la confianza para salir a los incendios era como de no porque pues tal vez no puedes, pero poco a poco me fui ganando la confianza de los compañeros fui demostrando que, si podía”, comento Tere.
En tan solo un año, María Teresa, ya ha afrontado diversas situaciones, recordando su primer incendio de buena manera.
“Mi primer incendio fue un incendio pastizal del cerro, ahí comencé, cuándo terminamos, llegué con dos fogasos en el labio por el calor porque no estaba impuesta, ya de ahí, me tocó entrar a la época en la quema de muchos pastizales, estar en el cerro, no me daba miedo, me fui acostumbrando al calor porque son cambios de temperatura bruscos”, expuso la bombero,
Debido a su corta edad y a sus sueños, la bombero no tiene pensado por el momento quedarse en el cuartel de por vida, pero mientras tenga la oportunidad, buscará aprovecharla y en un futuro salir a cumplir sus metas.
“Me gustaría seguir aprendiendo porque cada día aprendo algo nuevo, en un futuro quisiera seguir estudiando enfermería y luego entrar a un hospital como enfermera en urgencias”, explicó María Teresa.
Por último, “Tere” mandó un mensaje a los irapuatenses.
“Cuando quieran convivir con nosotros aquí tienen su casa, o cuándo se les ofrezca algo estamos para servirles”, finalizó María Teresa Hernández Rodríguez.
