Irapuato, Guanajuato.- Jonathan Uriel y María del Carmen, una pareja de jóvenes abasolenses, tuvieron la dicha de convertirse en padres, desde el primer momento María del Carmen, se atendió en el Hospital Materno Infantil de Irapuato, pero ahora en su semana número 40 de gestación, está viviendo un “viacrucis” por la supuesta mala atención medica que les brinda el personal médico.
“Ayer fuimos a hacer un ultrasonido por fuera porque nos mandaron a un hospital privado y en el ultrasonido que hicimos por fuera, la bebe pesa 3 kilos 800 gramos y resulta ser que, en el Materno, pesaba 2 kilos con 500 gramos y eso fue algo que nos sacó de onda y nos preguntamos entonces quién está mintiendo” dijo Jonathan.
Por otro lado, Jonathan mencionó, que no sabe si es protocolo de la unidad médica pero que a “fuerzas” quieren que el parto sea natural cuando ya pasaron las 40 semanas de gestación, aunque se torne peligroso.
“Nosotros somos de Abasolo, no tenemos carro propio, tenemos que pedirlo prestado y nos tienen viniendo muy seguido, algunos doctores nos dicen que se hará cesárea, otros que será natural y para nosotros es muy frustrante, me desespero, siento mucha impotencia, queremos que nuestra hija este bien, en vez de salir de ese lugar motivados y tener la seguridad de que todo estará bien, honestamente sales frustrado, mi esposa a veces sale llorando del coraje pues no hacen nada” externó.
Jonathan, externó que ellos llegaron al Hospital Materno Infantil por la recomendación de una amiga la cual mencionó que había recibido un trato maravilloso en dicha unidad médica, pero el abasolense se dio cuenta de que una de las tías de su amiga es trabajadora social, por eso la paciente recibió una atención “VIP”, desde su punto de vista.
“No somos los únicos que pasamos por esto, hay otras chicas que a fuerzas quieren que se alivien por parto natural, vuelvo a repetir, no sé si sea protocolo, pero creo que está muy mal, pues arriesgan a las madres y los bebés que traen en su vientre”, explicó.
María del Carmen, quien es la paciente afectada, mencionó que le dijo a una de las enfermeras, viendo la “pésima” atención que recibía, que si ellos se harían responsables de lo que sucediera con su bebe si le pasa algo, a lo que le contestaron que no, que hay muchas mujeres más delante de ella.
“Para que te atiendan, tienes que llegar casi muriéndote de dolor, quieren que uno llegue casi muerto para meterlo en urgencias y se puedan aliviar, solo nos dejan ver su pésimo servicio” finalizó Jonathan.
Cabe destacar que ante este caso no existe una denuncia formal de los hechos suscitados.
Aunque hay que señalar que el estado de Guanajuato, es líder nacional con siete Centros de Salud Certificados y más del 98 por ciento de las unidades médicas acreditadas. Entre estos Centros de Salud Certificados están la UMAPS Corralejo en Pénjamo; el CESSA en Cuerámaro y la UMAPS de Pueblo Nuevo.
En primer nivel de atención se encuentra; el Hospital Materno Infantil Irapuato, el Hospital Materno Celaya quien hace poco ganó el premio nacional de calidad en salud.