Cuerámaro, Guanajuato.- Reyna García Troncoso de 73 años, lleva más de 40 años en el comercio del municipio de Cuerámaro y la hermandad y amistad que ha creado con sus clientes y compañeros comerciantes es algo que valora todos los días.
“Todo inicio porque mi esposo no tenía trabajo comenzamos a vender medias, calcetines y después ingresamos más y más, en el trayecto hemos tenido altas y bajas, pero gracias a Dios hemos salido adelante”, dijo.
Reyna señaló que ella es feliz siendo comerciante y disfruta vender todas las temporadas del año ofreciendo calidad y precio a los cueramarenses.
La familia de Reyna está compuesta por su esposo y sus tres amados hijos quienes han sido su inspiración para salir adelante desde que eran unos niños.
“Mis hijos son la segunda generación de comerciantes y siento muy bonito, aquí he vivido muy bien, el comercio nos ha ayudado mucho y Dios nos ha bendecido a manos llenas, aquí también todos somos una familia, todos nos apoyamos”, señaló.
La comerciante explicó que lo más difícil que vivió fue perder a su mamá Nicolasa Troncoso quien siempre estuvo ahí en vida para tenderle la mano a ella y a sus hijos, la recuerda con mucho cariño.
“En el comercio he conocido a mucha gente, gracias a Dios en este camino he encontrado a gente maravillosa que me trata muy bien, en Silao, Pueblo Nuevo, Pénjamo, Manuel Doblado, Romita, León, Irapuato hay personas que me quieren como yo las quiero a ellas, mucho”, dijo.
Reyna en la actualidad suma más de 40 años en el comercio y espera cumplir muchos más ofreciendo sus productos de temporada a la ciudadanía cueramarense.
