Por Martha Herrera Siller
Opinión.- El mundo verdaderamente interesante es aquel que observamos, rendidos ante la natural esencia pura del momento, del encanto majestuoso de las personas, de su sol y de los destellos de su vida y sin duda, las actuaciones de Charles Chaplin, a través de Charlot, el personaje que caracterizaba de vagabundo, emanaba: encanto, simpatía, ternura, ingenio, drama, empatía, así como un espíritu valiente para enfrentarse al mundo, y terminar en algunas ocasiones con un final feliz. El traje de su inolvidable personaje, era un excelente contraste: sombrero pequeño, zapatos grandes, pantalones de anchas perneras y chaqueta estrecha, en su rostro, debajo de su nariz, un bigote corto y un bastón de bambú que giraba de vez en vez. Para dar movimiento a su gracioso andar, tomo el ejemplo de los vagabundos de la calle, quienes caminaban con dolor por tener los pies a la intemperie, maltratados o destrozados ya que usaban zapatos desgastados y abiertos o simplemente carecían de calzado. Cuando Charles Chaplin entro al escenario con el personaje del pequeño vagabundo, fue como si hubiera vuelto a nacer ya que el vestido hizo al personaje y la genialidad artística hizo todo los demás.
Charles Spencer Chaplin nace en la calle East de Walworth, en Londres, Inglaterra el 16 de abril de 1889. Sus padres pertenecían al mundo del espectáculo. Se conoce que Chaplin debutó a los cinco años de edad reemplazando a su madre en una actuación ya que no pudo continuar cantando por quedarse afónica y desde ese momento marco su destino en el escenario, Charles ya no dejo de actuar, supliendo a su madre. Esto le permitió en pocos años hacerse de una gran capacidad interpretativa para la comedia y la mímica.
Su padre, Charles Chaplin, era un actor de origen judío, un virtuoso del violonchelo, pero desafortunadamente murió joven por problemas de alcoholismo. Su madre, Hannah, cantante, bailarina y actriz, tuvo que hacerse cargo de la manutención de sus hijos Sydney y Charles, pero ante los trastornos mentales que padecía, fue internada en un centro psiquiátrico. Charles y su hermano mayor, vivieron en diferentes orfelinatos e instituciones de caridad. En ocasiones se ganaban la vida subsistiendo en las calles cantando o haciendo mímica.
Con tan sólo doce años de edad trabajó para Fred Karnos como actor, con quien recorrió algunos países. A los veintiún años se traslada a los Estados Unidos, con la compañía, en donde interpretó por 3 años consecutivos el personaje de un borracho, para conseguir risas. El aprendía de la gente, la observaba bien.
Fue en el filme “Carreras de autos para niños” en 1914, en donde aparece por primera vez, con el personaje de Charlot. En 1915, fue contratado por Essanay, realizó varias películas, entre las que destaca “El vagabundo”, en las cuales, quedó definitivamente fijado el peculiar universo de Charlot. Refiere Tony Merryck, historiador y nieto de Charlot: “Sus películas se concentraban más en la reacción del personaje por la situación que la situación en sí. Ese era el talento que tenía Charlot, no era pantomima, sino la comedia en movimiento, con esto se hace algo divertido sin intentar hacer que sea gracioso”,
1915, fue el año del Chaplinitis, por su gran éxito y fama, pero él, no era consciente de ello, hasta que en 1916 en una estación de tren en Chicago, experimento su fama, tras ser recibido por una gran multitud que se aglomero para recibirlo.
Por su popularidad y su personaje Charlot en múltiples películas, es considerado un símbolo tanto del humorismo, como del cine mudo. Para el final de la Primera Guerra Mundial, era uno de los hombres más reconocidos de la cinematografía mundial.
En algunas de sus películas integraba la música y el estilo de vida de la gente del sur de Londres y canciones tristes sobre niños: como el de un niño que había perdido a su padre, o deseos de ir al cielo. Siempre recordaba la música que escuchaba de niño, la gente reaccionaba llorando por los melancólicos temas.
Chaplin, fue el primero en crear el concepto de películas independientes, en 1919 se alió a otros actores como Douglas Fairbanks, David Wark Griffith y Mary Pickford para fundar la productora United Artists, rodó su primer largometraje “El Chico” (The Kid, 1921), que incluye elementos autobiográficos y su preocupación por los niños abandonados.
Sigmund Freud escribió sobre Charles Chaplin: “Es un caso excepcionalmente sencillo y transparente. Él siempre se interpreta a sí mismo, tal como era en su sombría juventud. No puede deshacerse de las humillaciones de ese período pasado de su vida”
Chaplin había madurado muchos aspectos relacionados con el cine y deseaba realizar otro tipo de películas ya sin el personaje del vagabundo, y debido a sus ideales, tiene la audacia de presentar críticas de trasfondo social, una de ella se refleja en El gran dictador (The Great Dictator, 1940), una sátira contra las dictaduras, en la que se caracteriza de Hitler. Con ella interpreta, produce y dirige, su primera película hablada.
La película Monsieur Verdoux, en 1947, su segunda película hablada. Es la historia de un hombre que tiene por negocio enamorar a mujeres ricas con el fin de quedarse con su dinero después de asesinarlas y mantener así a su familia. El tema no agrado como se esperaba, aunque actualmente se considera a esta película, como una gran obra maestra, fue escrita, dirigida y protagonizada por el mismo Chaplin.
“En octubre de 1947 el congresista de Nueva Jersey, John Parnell Thomas, abrió una investigación sobre la posible penetración comunista en la industria cinematográfica de Hollywood, citando e interrogando a figuras del medio cinematográfico. Charlot, que encabezaba la lista de culpables, decidió no asistir a la audiencia y en su lugar envió un telegrama en el que admitió no ser comunista sino pacifista”
Rodó su última gran película, Candilejas (Limelight 1952). Es una referencia autobiográfica y es su mejor película porque reúne elementos especiales, desde el tema sensible y original, con un excelente guion, una magistral partitura, producción, dirección y la propia actuación de Charles Chaplin. Es Candilejas su película final la que logró conmover por su drama y por su humor, representando al cómico que vive en los escenarios del Londres de 1914. La historia de una bailarina y un payaso, que le permite abordar temas como el amor, el valor de la vida y la lucha para seguir adelante. La marcada diferencia de edad en la que convergen la juventud y éxito de la bailarina y la vejez y decadencia del payaso, en el escenario. Al ver a Calvero (nombre de su personaje) es un espejo que refleja al mismo Charles Chaplin y su sentir en esa época.
Charles Chaplin se exilió de los Estados Unidos en 1953, adquirió una mansión en Corsier-sur-Vevey, en Suiza, donde residió hasta su muerte. Betty Chaplin Tetrick, sobrina de Charlie Chaplin, comentó:
“Nos tenían considerados como a una familia polaco-judía, no sabían nada sobre las tumbas en Inglaterra, todavía seguían convencidos de que éramos espías y de que sus creencias eran comunistas”
Las películas en las que se acentúo una fuerte crítica social fueron: El peregrino, Vida de perro, El chico, Luces de la ciudad, La calle de la tranquilidad, Tiempos modernos, El gran dictador, Monsieur Verdoux y Un rey en Nueva York.
En vida recibió importantes premios en reconocimiento a su trayectoria cinematográfica:
Recibió una estrella en el Paseo de la Fama de Hollywood en 1970. La Academia de Artes y Ciencias Cinematográficas, otorga un Oscar honorífico a Chaplin EN 1972 (el primero lo había recibido en 1929 por “El Circo”). El premio marcó su reencuentro con Estados Unidos. Cuando Chaplin entró al escenario, fue ovacionado por el medio artístico presente, fueron 12 minutos aplaudiendo de pie y efusivamente. Chaplin estaba profundamente emocionado por este gran tributo, su mensaje fue:
«Las palabras parecen tan insignificantes, tan inútiles. Sólo puedo decir que… gracias por el honor de ser invitado aquí, y… ¡oh!, son gente maravillosa y dulce, gracias».
En 1973 recibió el Oscar por la banda sonora de su película Candilejas. El 2 de marzo de 1975, la reina Isabel II del Reino Unido lo nombró Sir por sus grandes méritos como actor.
Homero Alsina Thevenet (considerado un maestro de la crítica cinematográfica) comentó:
“Chaplin visto de espaldas es más famoso que el rostro de cualquier hombre público artista o político del siglo XX y de cualquier otra época. Su personaje clásico ingresó hace varias décadas a la mitología de la cultura popular, y hasta un niño en un rincón apartado del mundo podría identificar fácilmente a esa figura.”
Charles Chaplin y Albert Einstein
“En una reunión social coincidieron Einstein y Chaplin, y fueron presentados. En el transcurso de la conversación, el físico elogió al cómico de la siguiente manera:
-Lo que he admirado siempre de usted es que su arte es universal; todo el mundo le comprende y le admira.
A lo que Chaplin respondió:
-Lo suyo es mucho más digno de respeto; todo el mundo le admira y prácticamente nadie le comprende”
Charles Chaplin murió rodeado por sus hijos, nietos y su última esposa, Oona O’Neil, en su casona de Vevey en Suiza, en la Navidad de 1977.
En 1981, la astrónoma Lyudmila Karachkina, (quien ha descubierto 131 asteroides) decidió nombrar como “Chaplin 3623” a uno de ellos.
Charles Chaplin decía:
“Hay que tener fe en uno mismo. Ahí reside el secreto. Aun cuando estaba en el orfanato y recorría las calles buscando qué comer para vivir, incluso entonces, me consideraba el actor más grande del mundo. Sin la absoluta confianza en sí mismo, uno está destinado al fracaso.”
