Irapuato, Guanajuato.- Rosa María Rocha y Miguel Sandoval Camarillo, una pareja originaria de Michoacán, llevan 40 años de matrimonio, ahora enfrentan una batalla, ya que a Rosa María le detectaron en días anteriores cáncer por lo que la mandaron a recibir su tratamiento a Irapuato.
El matrimonio se encuentra lejos de su hogar, enterándose de la existencia de la estancia del DIF a través de las redes sociales; ahí han permanecido en Irapuato durante más de 30 días.
A diario, acuden puntualmente a las 9:15 de la mañana al centro médico en Génova para recibir el tratamiento necesario, el cual es cubierto por el seguro del IMSS con el que cuentan, pero se levantan a las 7 de la mañana para meterse a bañar y cambiarse.
A pesar de contar con algunas “comodidades” en el lugar donde se hospedan, como una estufa, microondas, entre otros, el costo del alimento corre por su cuenta.
La situación se complica para Rosa María, quien ha tenido que adaptar su dieta debido a su enfermedad, ya que el doctor le quitó el consumo de grasas y lácteos.
Rosa María recibe radioterapia y quimioterapia oral, un tratamiento que, según los médicos le dijeron resulta menos agresivo, el proceso dura aproximadamente unos 15 minutos.
Uno de los grandes desafíos con los que “luchan” a diario es el costo del transporte, por eso decidieron caminar desde las instalaciones de la estancia a un costado de la plaza de toros hasta el centro médico, ya que el seguro no les brinda viáticos.
Miguel Sandoval mencionó que anteriormente el seguro si les proporcionaba este beneficio. A pesar de las dificultades sus familiares son quienes les mandan dinero para enfrentar esta enfermedad y poner cubrir con sus necesidades básicas.
