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Autopista a San Miguel de Allende: de proyecto público a negocio privado

La licitarán y darán como “regalo” la concesión de la carretera de cuota Guanajuato-Silao

Guanajuato.- Es un proyecto que tiene 13 años de haber sido anunciado. Al principio se trató de un proyecto que sería realizado por el gobierno del estado. Las confrontaciones con el gobierno federal reforzaron la propuesta de que fuera concesionada. En agosto se define quién realice la obra -que costará más de 4 mil millones de pesos-. Como “ganancia”, la empresa ganadora tendrá la concesión de la rentable autopista Guanajuato-Silao, que tiene ingresos por más de 250 millones de pesos al año y gasta 53 millones en su mantenimiento.

El tema ya levantó ámpula en la oposición morenista en el Congreso del Estado, ante un gobierno saliente que acelera el otorgamiento de la obra para evitar ser auditado en la próxima legislatura, en la que el panismo no tendrá el control.

Obra postergada

A mediados de 2023, Tarcisio Rodríguez Martínez, Titular de la Secretaria de Infraestructura, Conectividad y Movilidad (SICOM), anunció que a más tardar en el mes de septiembre sería lanzada la licitación para la construcción de la autopista que conecte Silao con San Miguel de Allende y prosiga hacia la carretera federal 57.

Se cumplían 12 años de un proyecto rechazado por otomíes, cuestionado por empresarios y a punto de ser cancelado por falta de recursos federales.

En esa convocatoria, que fue declarada desierta a principios de 2024, la autopista irá acompañada de dos obras complementarias: la ampliación a cuatro carriles de las carreteras San Miguel de Allende-Dolores Hidalgo (que llamarán boulevard Libertad) y Silao-San Felipe. Ahora se le agregó la concesión de la autopista Guanajuato-Silao.

El proyecto

Tarcisio Rodríguez Martínez, Titular de la Secretaria de Infraestructura, Conectividad y Movilidad.

La autopista partirá de Silao, pero ya no llegará directamente a San Miguel de Allende: pasará por el norte de la cabecera municipal, cerca del sitio histórico de Atotonilco. Esto se debe a la oposición de integrantes de comunidades otomíes, especialmente Palmar de Vega, y de fraccionadores particulares.

La vialidad continuará hacia el norte para facilitar conectarse con la que va hacia la carretera 57.

La autopista iniciará en comunidad de Los Rodríguez. Será la continuidad del libramiento de cuota que conecta a la autopista Silao-Guanajuato con el eje metropolitano. En la licitación que se lanzó nuevamente este año, se contempla la administración de la vía de cuota Guanajuato-Silao.

La autopista cruzará por el norte de la presa de la Purísima hasta casi llegar a la carretera Guanajuato-Juventino Rosas. La autopista continuará al sur paralelamente a esa vía, para quebrar hacia el norte antes del entronque hacia San Miguel de Allende. Pasará cerca del Xoconostle y seguirá paralelamente al norte de la carretera libre hacia esa ciudad.

Se conectará con el bulevar Libertad, obra en la que el gobierno del estado invierte 2 mil 500 millones de pesos.

Tarcisio Rodríguez informó que el proyecto tiene un 95 por ciento en temas técnicos, por lo que se espera que en el segundo semestre del año ya tengan el proyecto y el trazo ejecutivo por donde pasará la autopista.

Por qué el cambio de trazo

En 2012, habitantes de la comunidad de Cruz del Palmar se manifestaron en contra de que la autopista que conectaba a Guanajuato con San Miguel de Allende atravesara por su poblado, principalmente El Calvario, una capilla representativa del pueblo, donde se encuentra la réplica del Señor del Santo Entierro, entre otras zonas que ellos veneran.

El tema se fue al plano legal y lograron que el Segundo Juzgado de Distrito de Guanajuato, emitiera un amparo. En septiembre de 2013 detuvieron la obra por orden del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), para que se revisara el trazo.

Cruz del Palmar está a 35 kilómetros de la ciudad de Guanajuato y la habitan más de mil 200 personas.

Finalmente, el trazo fue modificado y la autopista pasará a 9 kilómetros por el sur de las comunidades otomíes de San Miguel de Allende, trazo que atiende la situación de conflicto para no dañar a los pueblos originarios.

La autopista a San Miguel de Allende estaba proyectada originalmente como concesión federal, pero ante el desinterés del gobierno de Andrés Manuel López Obrador pasó a ser de índole estatal. Constará de más de 70 kilómetros de longitud. Como tampoco el gobierno guanajuatense quiso invertir en ella, la licitación será para que se convierta en obra privada, concesionada a 30 años.

El regalo al ganador

Además de concesionar la autopista a San Miguel de Allende, el Gobierno del Estado concesionará la autopista Guanajuato-Silao, que es de su propiedad, a la empresa que gane la licitación. Van “en paquete”, aclaró Tarsicio Rodríguez.

La concesionará durante 30 años y contempla que la empresa ganadora remodele en su totalidad la autopista Guanajuato-Silao y que por su cuenta corran los gastos de mover las casetas de acceso. Ahora estarán ubicadas en las inmediaciones de Santa Teresa y de ahí habrá dos salidas: una hacia Cervera y otra que siga hacia la Glorieta Santa Fe.

La zona de casetas tendrá cinco carriles de entrada y cinco de salida, lo doble de lo que ahora utilizan. Las casetas serán recorridas un kilómetro hacia Silao y quedará libre el tramo hasta la glorieta. La obra de modernización de la autopista tendrá una inversión de 600 millones: 240 para su nuevo acceso de casetas y el resto para reposición de la cinta asfáltica. Será labor de la empresa administras y dar mantenimiento a la autopista.

El tema ha levantado críticas, pues en 2023 la autopista tuvo un ingreso de más de 252 millones de pesos y se destinaron 53 millones a su operación y mantenimiento. Para el ejercicio fiscal 2024, se tiene previsto recaudar 261.7 millones de pesos.

La autopista Guanajuato – Silao fue inaugurada durante el gobierno de Rafael Corrales Ayala, el 16 de agosto de 1989. En agosto próximo cumplirá 35 años.

Es una vialidad de cuota con una longitud total de 13.52 kilómetros, con 21.00 metros de ancho, conformada por dos carriles por sentido de 3.50 metros cada uno, un acotamiento externo de 2.50 metros por sentido y una faja separadora central de 2.00 metros de ancho.

Según el funcionario, la concesión de esta autopista es para garantizar la rentabilidad a la empresa que construya y opera la que va a San Miguel de Allende.

En total, la empresa ganadora de la licitación deberá invertir entre 4 mil y 4 mil 500 millones de pesos en la autopista a San Miguel y 600 en la de Guanajuato-Silao.

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