Temporada de sequía se prolongará hasta mayo

México. La Comisión Nacional del Agua (Conagua) informó que la temporada de sequía, que inició en noviembre de 2024, se prolongará hasta mayo de 2025, afectando directamente el abasto de agua en varias entidades. Además, señaló que hasta el 24 de febrero pasado, las presas del Sistema Cutzamala, que abastecen a la Ciudad de México y el Estado de México, registraron un almacenamiento del 60.8%, una cifra considerablemente inferior al promedio histórico de 72.3%, lo que ha obligado a implementar recortes en el suministro.

El almacenamiento inadecuado del agua ha derivado en problemas de salud pública. La Secretaría de Salud reportó un aumento del 22% en enfermedades gastrointestinales durante los primeros meses de 2025 en zonas con acceso irregular al agua potable. Estudios en muestras de agua almacenada identificaron coliformes fecales en el 65% de los casos y niveles de cloro por debajo de lo recomendado, lo que aumenta el riesgo de infecciones.

Además, el Instituto Mexicano de Tecnología del Agua (IMTA) detectó contaminantes emergentes, como residuos de fármacos y compuestos industriales en el agua almacenada en hogares sin medidas adecuadas de protección. Paralelamente, el almacenamiento en cubetas sin tapa ha facilitado la proliferación de larvas del mosquito Aedes aegypti, transmisor del dengue, lo que incrementa el riesgo de brotes en comunidades afectadas por la crisis hídrica.

Ante este panorama, especialistas han señalado la urgencia de adoptar medidas seguras para el almacenamiento de agua. Para mitigar los riesgos asociados con el almacenamiento inadecuado de agua, recomiendan el uso de tinacos y cisternas cerradas, diseñadas específicamente para conservar el recurso en condiciones seguras y libres de contaminantes.

A diferencia de cubetas o tambos abiertos, estos sistemas evitan la proliferación de microorganismos, protegen el agua de agentes externos y mantienen su calidad por más tiempo. Además, contar con un sistema de almacenamiento adecuado es clave en contextos de escasez, ya que permite gestionar el suministro de manera eficiente y garantizar el acceso al agua potable en los hogares.

Asimismo, los expertos señalan que es fundamental realizar un mantenimiento periódico de los depósitos de almacenamiento, incluyendo su limpieza y desinfección al menos cada seis meses. Esto, junto con el uso de tapas herméticas y el tratamiento adecuado del agua mediante cloración o filtración, previene enfermedades relacionadas con la contaminación del agua. Mientras la sequía persista, garantizar un almacenamiento seguro será clave para proteger la salud y asegurar el acceso al agua en los hogares mexicanos.