Irapuato, Guanajuato.- Hace muchos años, el panteón municipal de Irapuato era conocido por una leyenda que hablaba de una culebra enorme y fuego que rodeaba uno de los árboles que adornan el lugar. Según la historia, un joven rondaba por el cementerio cuando vio la aterradora imagen, pero no fue el único. Varios comerciantes y visitantes aseguraron haber visto lo mismo y sentir un escalofrío recorrer su cuerpo al estar cerca del árbol.
A pesar de que los años han pasado, el árbol en cuestión sigue en pie, aunque con una apariencia distinta a los demás. Los visitantes que se acercan a él, aseguran sentir una extraña sensación de angustia y nerviosismo, aunque otros afirman no haber notado nada inusual.
Esta leyenda ha sido parte del folclore de la ciudad por muchos años y ha generado diversas teorías y explicaciones sobre su origen y veracidad. Aunque nadie ha logrado comprobar lo que realmente sucedió en aquel lugar, la historia continúa siendo contada y transmitida de generación en generación, manteniendo viva la mística del panteón municipal de Irapuato.