Abasolo, Guanajuato.- Jesús “Chuche” García es un hombre que tuvo que emigrar a los Estados Unidos de “mojado”, pero regresó a Abasolo, a las labores del campo y a forjar un hogar.
Jesús García es originario del ejido de Munguia que pertenece a Irapuato, pero lleva más de 25 años viviendo en Abasolo, es una persona que conoce lo que es trabajar en el campo y especialmente sabe ganarse la vida por medio del esfuerzo y la tenacidad.
“Somos 13 hermanos; a los 21 años me fui a los Estados Unidos de mojado, la intención era juntar un recurso y terminar la carrera de medicina que estaba cursando en Morelia; llegué a California, comencé trabajando como transportista de material para los techos de las casas, y después compré mi propio camión para trabajar, ya era contratista” dijo Jesús.
El abasolense comentó que “tenía miedo como todos, estuve 10 años y luego me regresé a trabajar a lo mío que es la agricultura; soy ejidatario, mi papá me cedió el derecho de ejidatario, siembro granos y alfalfa”.
Dolores González, esposa de Jesús mejor conocida como la maestra “Lolis”, relató que ella estuvo como docente en el jardín de niños de Estación de Abasolo, “tengo un año que me jubile, tenemos una hermosa familia, Jesús Antonio, está por terminar la carrera de medicina, Andre en ingeniería mecánica automotriz y Joselyne está estudiando en el bachillerato”.
El matrimonio de Chuche y Lolis se ha ido consolidando con el paso de los años, porque entre ellos según sus propios comentarios, ha sido de mucha unidad, de grandes sacrificios para poder dar estudio a sus hijos, pero una de las grandes satisfacciones, ha sido que todo ese esfuerzo se ha recompensado con todas las amistades que han logrado generar.
“Chuche” expresó que siempre ha estado preocupado y ocupado para que en el campo existan las mejores condiciones, al mencionar que todo lo que ocurre en la ciudad es muy importante, pero en Abasolo, la agricultura y la elaboración de tabique necesitan un lugar especial.
