México.- Una de las ideas que podemos encontrar en el arte contemporáneo es plantear preguntas y entender la cotidianeidad a nuestro alrededor, esta idea la vemos reflejada en artistas como Bartholomäus Traubeck, quien ha creado un sistema para transformar los anillos de un tronco en piezas musicales “de aire neoclásico”.
En la actualidad, la música se ha ido transformando en piezas digitalizadas, hemos visto a gente hacer música casi con cualquier cosa, sin embargo en esta exploración por crear y volver a lo orgánico el artista alemán Bartholomäus Traubeck, junto con un grupo de diseñadores, músicos e informáticos ha descubierto la forma de convertir estos círculos creados por la naturaleza en arte.
Decidió adaptar un tocadiscos para poder interpretar y oír sonidos atonales de anillos de los árboles, el resultado fue la pieza llamada “Years”.
“En troncos rebanados, el tocadiscos absorbe la data de los anillos usando una “PlayStation Eye Camera” y un motor, ambos conectados al brazo fonocaptor. La información compilada es traducida por un software Ableton Live, y así cada pedazo adquiere su propio sello sonoro. Una melodía elegante y misteriosa, por cierto cualidades intrínsecas en la naturaleza de un árbol”, según describe el artista.
El experimento de esta pieza crea una atmósfera nostálgica pero inspiradora y así como decía el escritor también alemán Herman Hesse: “el árbol no muere, espera” y esta pieza artística es la prueba de esto.
Lo que podrás escuchar a continuación es un extracto del disco y de la instalación “Years”. Su trabajo contiene siete grabaciones basadas en los anillos de edad, y sus características como fuerza, grosor y crecimiento, de diversos árboles, entre los que se incluyen roble, arce, nogal y haya.
Por Alejandra G. Partida
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