Te presentamos a la sífilis, una ETS aparentemente silenciosa

Por Daniela Solórzano.

Guanajuato.- La sífilis es una infección causada por la bacteria ‘espiroqueta treponema pallidum’ y existen dos formas de contagio: mediante las relaciones sexuales sin protección y por transmisión de madre a hijo durante el embarazo o el parto.

De acuerdo con el Boletín de atención integral de las personas que viven con VIH publicado en 2004, La Secretaría de Salud detectó en Guanajuato 10,758 casos de sífilis en mujeres embarazadas desde el 2017 hasta el 2024.

“La sífilis es considerada un riesgo significativo para la salud de la madre y el niño. Se estima que, de todas las embarazadas con sífilis no tratadas, solo el 20% llevará al feto a término con un niño sano. La mortalidad neonatal es del 54% en los menores afectados, siendo la prematurez una causa importante de esta mortalidad”.
Debido a sus síntomas, que en gran parte son inadvertidos una de las enfermedades que mayor impacto tiene en la población mexicana, y aunque su tratamiento requiera de cuidados que podrían llamarse sencillos, si no se atiende a tiempo, los daños podrían ser permanentes.

Síntomas:

Los síntomas comienzan generalmente a los 21 días después de haber contraído la infección. No obstante, el tiempo de aparición puede variar de 9 a 90 días. Además, los síntomas pueden aparecer y reaparecer periódicamente.

• Etapa primaria: Apariciones de llagas o úlceras (chancros) en las partes del cuerpo que entraron en contacto con la bacteria. Esta etapa puede pasar desapercibida, por lo regular sólo aparece un chancro y no causa dolor. Incluso estas úlceras se confunden fácilmente con granos, duran aproximadamente un mes o mes y medio en la piel y luego desaparecen para dar paso a la segunda etapa.
• Etapa secundaria: Erupción en varias partes del cuerpo que puede confundirse con otros síntomas. El sarpullido afecta principalmente las palmas de las manos y las plantas de los pies y es indoloro. La fiebre, inflamación de los ganglios linfáticos, pérdida de peso o cabello, dolor de cabeza y cansancio son otros signos que acompañan esta etapa.
• Etapa tardía: Los periodos en que las manifestaciones de la enfermedad no están presentes pueden ser de meses o años. Esta etapa ocurre entre los 10 y 30 años después de presentarse la infección. Los daños musculares como la parálisis, ceguera y entumecimiento son frecuentes, además de enfermedades cardiovasculares y granulomas, que afectan a cualquier órgano del cuerpo hasta causar la muerte.

El tratamiento en las primeras etapas es la prescripción de antibióticos y es importante no mantener relaciones sexuales de ningún tipo hasta haberlo concluido. La visita al médico es indispensable para no agravar la enfermedad.